El aumento de casi un 18% que ha registrado la recaudación tributaria en la provincia en los tres primeros meses del año no responde únicamente a la mayor actividad económica, una vez superados los peores efectos de la pandemia. Una parte considerable de ese incremento se debe también a las consecuencias de la inflación, que supone "una subida encubierta de impuestos" para los contribuyentes.
Así lo han advertido este miércoles los responsables del Colegio de Economistas de Alicante durante la comparecencia pública que han realizado para informar de las principales novedades de la Campaña de la Renta, en la que han reclamado la deflactación de las tarifas del IRPF para evitar la doble pérdida de poder adquisitivo que van a sufrir muchos contribuyentes, por la subida de precios, pero también por los mayores impuestos que tendrán que pagar.
Como ha apuntado el decano del Colegio, Francisco Menargues, esta es la situación en la que se encontrarán, por ejemplo, aquellos trabajadores que hayan tenido alguna subida de sueldo. Aunque esa subida sea menor que la inflación y, por tanto, su poder de compra real sea inferior al del año pasado, pagarán más impuestos y algunos incluso subirán de tramo, con lo que el aumento será aún mayor, "cuando realmente con el dinero que ganan podrán comprar menos".
Algo que incluso notarán mes a mes, en la retención que les aplica su empresa, como ha apuntado el miembro de la junta directiva del Colegio de Economistas, Antonio Rodríguez.
Adaptar los tramos
Frente a esta situación, los economistas consideran que deberían deflactarse las tarifas o, en otras palabras, adaptar los tramos a partir de los cuales se fijan los distintos tipos del IRPF para reflejar esa pérdida de poder adquisitivo y que el dinero ya no cunde de la misma forma. Así, si ahora se pasa del 19% al 24% a partir de 12.450 euros, una deflactación del 3% supondría elevar este límite a 12.823 euros. Y así sucesivamente.
Por otro lado, los economistas alicantinos también han recordado que, con las últimas subidas, el tipo máximo del IRPF en la Comunidad Valenciana para las rentas de más de 175.000 euros pasa a situarse en el 54%. Una cifra que supone 8,5 puntos más que en Madrid, como ha recordado Rodríguez, lo que sitúa a la autonomía como la región con el tipo marginal más elevado para las rentas alta de toda España, y también una de las mayores de toda Europa.
Así, si la Comunidad Valenciana fuera un país, los ricos solo pagarían más impuesto sobre la renta en Dinamarca, donde el tipo llega al 55,9%, según la información facilitada. Además, Menargues ha recordado que ha esta diferencia en el IRPF también hay que sumar los mayores pagos por el Impuesto de Patrimonio, ya que en la autonomía el mínimo exento se ha rebajado a 500.000 euros, frente a los 700.000 euros que se aplica con carácter general en el conjunto del estado.
Al respecto, el presidente de los economistas alicantinos, además de considerar "confiscatorio" un tipo tan elevado de IRPF, ha recalcado que esta diferencia tan elevada con otras partes del país supone un freno a la hora de atraer y retener talento para las empresas de la zona, o para la llegada de teletrabajadores de sectores emergentes, donde se pagan sueldos elevados.
Ingreso Mínimo Vital
Desde el Colegio de Economistas también han criticado que se obligue a los perceptores del Ingreso Mínimo Vital a presentar la declaración del IRPF, cuando esta ayuda está exenta de tributación. Así, Antonio Rodríguez ha apuntado que para muchos beneficiarios esta obligación puede suponer un gasto adicional, si no tiene capacidad para presentar la declaración por su cuenta, y tiene que recurrir a un profesional para que se la haga. Todo un contrasentido, según el experto.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Fiscal del Colegio, Antonio Pérez Rovira, ha recordado los consejos básicos a la hora de afrontar esta obligación con el fisco, como son repasar siempre los datos que aparecen en la declaración antes de confirmarla, ya que "la Agencia Tributaria no dispone siempre de toda la información, o puede tener datos erróneos". En especial, ha recordado que los borradores no suelen incluir las deducciones autonómicas ni muchas exenciones que existen para colectivos especiales.
Pérez Rovira ha insistido en esta ocasión en recordar el tratamiento especial que tienen los mayores de 65 años, por ejemplo, si han vendido su vivienda habitual. Además, tampoco deben tributar por las prestaciones para financiar su estancia en residencia o centros de día, si el resto de rentas no exceder el doble del IPREM.
En total, la Agencia Tributaria prevé recibir este año 851.535 declaraciones en la provincia, un 2% más, de las que 522.056 serán a devolver, por un importe de 347 millones, y otra 227.028 resultarán positivas -a pagar-, por un valor de 502 millones.
