Los extranjeros que quieren comprarse una casa en la Costa Blanca deben pasar antes por las comisarías de Murcia o de Almería. Al menos ésa es la peculiar solución que se han visto obligados a improvisar los promotores alicantinos ante las cada vez mayores dificultades que existen para tramitar el NIE (Número de Identidad de Extranjero) en las dependencias policiales de la provincia, por falta de citas disponibles. Un documento que resulta preceptivo para poder formalizar y, por tanto, hacer efectiva cualquier operación de compraventa de inmuebles con los clientes internacionales, que suponen casi la mitad del mercado inmobiliario de la zona.

“La situación es desesperante. La imagen que transmitimos es tercermundista”, asegura el secretario general de la Asociación Provincial de Promotores (Provia), Jesualdo Ros, sobre esta peculiar peregrinación que deben realizar con sus clientes, a cientos de kilómetros de donde se ubica la casa que quieren comprar.

El problema está en que la tramitación del NIE se realiza en las mismas dependencias que el DNI, que en el caso de la provincia de Alicante se encuentran saturadas. Como publicó este diario hace unos días, en muchas comisarías de la zona, como las de la capital o las de Elche, resulta casi imposible coger cita y en otras como las de Torrevieja, Orihuela o Elda la demora supera los dos meses.

“En realidad es un mal endémico en esta zona, siempre ha habido problemas para conseguir citas y llevamos años denunciándolo en la Subdelegación del Gobierno, pero desde el final de las restricciones por la pandemia la situación se ha vuelto imposible”, apunta Ros.

Colas en la comisaría de Elche para tramitar el DNI. ANTONIO AMOROS

Así, ya era habitual que las promotoras alicantinas tuvieran personal trabajando los sábados y los domingos para encargarse de solicitar citas para sus clientes, ya que el fin de semana se abrían las nuevas ventanas desde la web de la Policía Nacional, y resultaba más sencillo hacerse con un hueco. También era frecuente que los profesionales peregrinaran por las distintas comisarías de la provincia en busca de aquellas con menos atasco –generalmente las del interior-, lo que ya había provocado las quejas de algunos funcionarios, que no veían con buenos ojos atender a ciudadanos de otras zonas fuera de su jurisdicción natural.

Pero ninguno de estos trucos funciona ya desde mediados del año pasado, cuando el mercado internacional empezó a reactivarse con el fin de las restricciones de la pandemia y se produjo un aluvión de operaciones. Una situación que llevó a los empresarios a ampliar su radio de búsqueda para localizar comisarías menos saturadas, lo que les está llevando hasta las provincias de Murcia y Almería.

Más allá de la incomodidad de tener que meter a los clientes en un coche y llevarlos a cientos de kilómetros para realizar un trámite administrativo, los empresarios temen que la situación también empiece a empeorar en estas zonas o que los funcionarios empiecen a ponerles pegas.

“A lo largo de los años hemos hecho un sinfín de propuestas para que fuéramos nosotros o las gestorías las que pudieran tramitar los NIE, pero no ha habido manera”, insiste el secretario general de Provia que, eso sí, señala que son pocas las operaciones que acaban anulándose por todas estas trabas, ante la paciencia que suelen mostrar los clientes. A su juicio, lo lógico sería que habilitara algún tipo de canal especial que facilitara este tipo de trámite, ante la importancia económica que alcanzan estas transacciones.

Iniciativa de los notarios

Lo cierto es que los propios notarios llevan tiempo buscando alguna solución a este problema, conscientes de las dificultades con las que se topan los compradores extranjeros de vivienda. De esta forma, el alicantino Delfín Martínez lidera un proyecto con la Agencia Tributaria para permitir que las notarías puedan obtener Números de Identificación Fiscal (NIF) provisionales para estos compradores, lo que permitiría que pudieran liquidar los correspondientes impuestos y escriturar las operaciones. Eso sí, más tarde deberían igualmente conseguir el NIE para la inscripción definitiva, aunque ya con mayor tranquilidad, tal y como señala Martínez.

De momento, el sistema ya está en fase de pruebas en algunas notarías de la provincia y la intención es que pueda generalizarse después del verano, si todo resulta según lo previsto.

Alicante es la provincia española con mayor volumen de transacciones de viviendas protagonizadas por extranjeros. Sólo el año pasado se formalizaron en las notarías de la zona 21.458 compraventas de inmuebles, lo que supuso el 20% de todas las que se registraron en el conjunto del país.

Por nacionalidades, los británicos fueron los más numerosos, con 3.424 viviendas vendidas, seguidos por los belgas, con 2.352; los suecos, con 1.942; los holandeses, con 1.761; los alemanes, con 1.701; y los franceses, con 1.452.

Un negocio de 3.584 millones anuales

La venta de viviendas a extranjeros supone una importante fuente de divisas para la economía alicantina, superior a la de cualquier exportación. Así, el año pasado este negocio movió 3.584 millones de euros en la provincia, de acuerdo con los datos del Colegio Notarial de València, una cifra incluso superior a la que se registraba antes de la pandemia, ya que, aunque el volumen de operaciones aún no fue el mismo, creció el importe medio de las transacciones.