Sudar en exceso suele ser un problema bastante incómodo para las personas que lo sufren y, aunque puede tener causas emocionales, en muchos casos se agrava ante episodios de calor intenso como el que estos días vive todo el país. Hasta ahora las principales alternativas para tratarlo pasaban por la cirugía, la iontoforesis –corrientes eléctricas en la piel- o la inyección de botox para bloquear la actividad de la glándula sudorípara, o bien por el uso de antitranspirantes basados en sales de aluminio, que obstruyen el poro en la capa externa de la piel reduciendo la sudoración

Sin embargo, desde la startup nacida en la Universidad Miguel Hernández Prospera Biotech proponen otra alternativa basada en actuar sobre los receptores nerviosos de la piel. Una estrategia que ya han aplicado en el desarrollo de otros productos que han lanzado al mercado, por ejemplo, para reducir la sensibilidad excesiva que ocasionan en la piel los tratamientos oncológicos.

En este caso, desde la compañía se han investigado los mecanismos moleculares que se encuentran desequilibrados en aquellas personas cuya sudoración excede las necesidades refrigerantes del cuerpo, es decir, aquellas personas que tienen una sudoración excesiva. Esta investigación ha permitido desarrollar y patentar una fórmula que afronta las causas de esta molestia regulando la actividad de la glándula ecrina mediante activos neuromoduladores.

"Estos activos actúan sinérgicamente sobre los terminales nerviosos de la piel y consiguen, por un lado moderar la actividad de la glándula ecrina y, por otro, aumentar su umbral de activación, teniendo como resultado la reducción de la sudoración sin recurrir a bloquear los poros", explica la doctora Marta García Escolano, directora de Prospera Biotech. Según el análisis independiente encargado por la firma, su nueva crema ha demostrado reducir la sudoración en un 50% en manos y axilas y supone la primera alternativa no invasiva a los antitranspirantes.

Los elementos de la fórmula, que ha sido patentada, provienen de moléculas desarrolladas por el grupo de investigación de Neurobiología Sensorial del IDIBE-UMH (Instituto de investigación, Desarrollo e Innovación en Biotecnología Sanitaria de la Universidad Miguel Hernández de Elche), que lleva más de 20 años estudiando los terminales nerviosos de la piel, los mecanismos que los activan y el relevante rol que el sistema neurosensorial juega en el equilibrio cutáneo.

Como señalan desde la firma, el sistema nervioso periférico es vital para los seres humanos, ya que nos permite recibir información del medio que nos rodea y adaptarnos a él. Este complejo sistema es, además, el responsable de respuestas tan esenciales como el dolor o el picor, sin las cuales el ser humano no sobreviviría.

La UMH creó Prospera Biotech para trasladar los resultados de las investigaciones en neurobiología sensorial a productos tangibles para la salud de los que pueda beneficiarse la población. Hasta ahora, esta compañía biotecnológica ha presentado formulaciones neuromoduladoras de aplicación para las pieles sensibles con tendencia atópica (Nocisens y Nocisens Intense), para la dermatitis de los bebés, incluyendo la irritación del pañal (Nocisens Baby), una crema para mitigar la sensibilidad ocasionada por los tratamientos oncológicos (Oncapsisens) y ahora, Ecrisens, esta nueva fórmula para controlar la sudoración excesiva.