El incremento de los costes ha puesto a las salas de bingo al borde del colapso. Así lo asegura la Asociación Valenciana de Juegos Legalizados (Ejuva), que reclama a la Generalitat un plan de viabilidad ante la imposibilidad de aumentar los precios de los cartones, que están fijados por el reglamento autonómico de juego.

A través de un comunicado, esta asociación, integrada en la Federación de Ocio y Turismo de la Comunidad (Fotur), hace referencia al encarecimiento de los suministros, las materias primas, los alquileres y el personal, con una media de un 30% de subida, a lo que hay que sumar también el aumento del precio de la luz.

En este contexto, Ejuva destaca que la rentabilidad que obtienen del cartón de juego se sitúa entre un 12% y un 14%, lo que, añade, no genera el margen suficiente para llegar al umbral de rentabilidad de la sala, lo que conlleva cuantiosas pérdidas económicas.

La entidad subraya que el margen de maniobra es mínimo, debido a que las ventas del cartón están estancadas y las salas de bingo tienen los precios fijados por el reglamento autonómico, por lo que resulta imposible repercutir las subidas de costes.

Con todo ello, Ejuva no duda a la hora de afirmar que el sector se encuentra al borde del colapso económico y que es necesario que por parte de la Administración se ponga en marcha con carácter perentorio un plan de viabilidad que garantice el mantenimiento de la actividad y de los más de 2.000 puestos de trabajo directo de las salas en el ámbito de la Comunidad Valenciana.

Cabe reseñar que las salas de bingo ya se vieron especialmente afectadas por la pandemia de coronaviruis, como consecuencia de las restricciones habilitadas para combatir la pandemia. Después de la apertura tras un largo periodo de cierre, estos establecimientos se enfrentaron a reducciones de aforo del 50%, lo que derivó a su vez en un descenso de los ingresos del 52%. El problema era generalizado en el sector del ocio de la Comunidad representado por Fotur, que cifraba las pérdidas en 53 millones de euros en la primera mitad de 2020.

Ya en aquel momento tan complicado Ejuva pidió un plan de rescate para las salas de bingo, reclamación esta que ha vuelto a poner sobre la mesa ahora, como consecuencia del incremento de costes al que se están teniendo con enfrentar en el actual escenario de inflación desbocada y aumento generalizado de precios, lo que, aseguran, ha puesto a las empresas contra las cuerdas.