Concentración sindical para protestar por la venta del edificio histórico de Correos en Alicante

En un comunicado, los sindicatos señalan que, con esta operación, "la dirección de Correos pretende tapar en parte el enorme déficit económico provocado por la deficiente gestión de su presidente, Juan Manuel Serrano, que acumula pérdidas económicas que superan los 800 millones de euros en la cuenta de resultados de la compañía postal desde que llegó a la presidencia".

CCOO y UGT manifiestan que esta venta se hace por un valor considerado extremadamente bajo, ya que cubre escasamente el valor de la reforma que se hizo recientemente en el edificio y que formó parte de un plan integral de revitalización de la zona, por lo que "prácticamente el edificio se regala con el único objeto de hacer caja a la desesperada para maquillar las pésimas cuentas del operador público a las que han llevado los actuales gestores del operador".

La venta de este emblemático inmueble, añaden, derivará en el traslado forzoso en plena campaña navideña, de todos los departamentos que actualmente trabajan en dicho edificio, la unidad de reparto número 1, la oficina principal, los servicios administrativos, los servicios comerciales y los servicios médicos, con un total de 75 trabajadores/as. Como consecuencia, en el caso de los adscritos en la oficina principal, se van a derivar a un local con carácter provisional por solo un año, lo que comportará la búsqueda de otro local, en el centro de Alicante que sirva de sede a la oficina principal, con el gasto de alquiler y nuevas obras de acondicionamiento necesarias.

El resto de colectivo afectado, explican, será llevado a otros locales de Correos con la necesidad de acometer obras de mejora, sumando en su totalidad en cifras este precipitado desalojo un importante desembolso económico, de más de un millón de euros y un coste organizativo de grave envergadura.

Acondicionamiento

Los sindicatos también aseguran que, a menos de un mes del traslado, como fecha tope el 20 de diciembre, los locales a los que se va a llevar al personal afectado no están acondicionados ni reúnen las condiciones mínimas de adaptación, para que sean ocupados por los trabajadores de Correos y para la accesibilidad, seguridad y atención a la ciudadanía.

Todo ello, indican en el comunicado, va a generar el caos a las puertas de una campaña de Navidad, donde se verán afectados hasta 11 distritos postales de la capital. "Como consecuencia del traslado y su reorganización, puede ocasionar un retraso y acumulaciones en el curso, tratamiento y entrega de la distribución postal y de paquetería, que supone un fuerte incremento en estas fechas señaladas, donde la venta on line se dispara, lo que va a producir malestar, desconfianza y perdida de fidelidad por parte de la ciudadanía Alicantina, cuando vean que sus paquetes, pueden no llegar en fechas tan señaladas", advierten.

Con la concentración de protesta antes las puertas de este edificio singular, los sindicatos quieren dar a conocer a la opinión pública de Alicante las consecuencias del desmantelamiento del servicio postal tal y como se conoce, "como queda reflejado con la venta de este edifico emblemático por debajo de su coste real, renunciando Correos a perder su esencia y el referente de esta institución centenaria en la ciudad de Alicante·, apuntan..

Tanto CCOO como UGT se han opuesto desde el principio a lo que consideran un desguace del servicio postal, por lo que exigen la inmediata paralización de la venta de la sede principal de la provincia de Alicante, que afectará seriamente al conjunto de los 75 trabajadores, que verán afectadas sus condiciones laborales, por el traslado forzoso, circunstancia que afectará gravemente a la conciliación familiar y laboral. Por todo ello este viernes día 25, de 9 a 10 de la mañana, se llevará a cabo una concentración de a las puertas del edifico em la Plaza Gabriel Miró de Alicante.