Los ingresos públicos son vitales para la supervivencia de las cámaras de comercio e industria de Alicante y Alcoy. Así se pone de manifiesto en el informe de fiscalización de la Sindicatura de Comptes correspondiente al ejercicio de 2021, que revela que ocho de cada diez euros que gestionan estas entidades proceden de subvenciones o actividades de esta naturaleza. La dependencia en este sentido es mucho mayor que la que tienen en València o Castellón, que cuentan con más aportaciones privadas. Con todo, las cuentas tanto de las cámaras de Alicante y Alcoy, como la de Orihuela, han recibido el aval de la Sindicatura, que no aprecia incumplimientos significativos de la normativa vigente. En todos los casos, además, han mejorado resultados con relación al año anterior. 

El informe de fiscalización realiza un análisis pormenorizado de los presupuestos del conjunto de las cámaras de la Comunidad Valenciana, así como de su consejo. De los diferentes datos que aparecen en este análisis, destaca el relativo a la distribución de los ingresos, sobre todo porque pone de manifiesto la dependencia que cada entidad tiene de los fondos públicos. Y las que se llevan la palma son Alicante y Alcoy.

Subvenciones

En el caso de la capital de la provincia, los ingresos públicos de la cámara, presidida actualmente por Carlos Baño y en aquel momento -su último año completo- por Juan Riera, ascendieron a 5.032.878 euros, lo que supone un 83,7% del total. La mayor parte de este importe, concretamente 3.787.014 euros, se corresponde con subvenciones procedentes, principalmente, de la Cámara de España y el Instituto Cameral para la Creación y Desarrollo de la Empresa (Incyde), y de otros estamentos como la Generalitat y la Diputación. El resto son ingresos provenientes de diferentes actividades, sobre todo de carácter formativo, que se llevaron a cabo con apoyo institucional.

La Cámara de Alcoy, por su parte, presenta una dependencia incluso superior en términos porcentuales, aunque con unos volúmenes económicos más discretos. Y es que el organismo presidido todavía en la actualidad por Pablo de Gracia ingresó 504.772 euros de carácter público, lo que representa un 85,2% del total. Las subvenciones, en este caso, ascendieron a 406.844 euros, de una procedencia prácticamente idéntica. Los datos correspondientes a la Cámara de Orihuela no constan en el informe de la Sindicatura de Comptes, toda vez que no los incluyó en la memoria de las cuentas anuales.

Lo que llama la atención, en cualquier caso, es que tanto la Cámara de Alicante como la de Alcoy dependen mucho más de los fondos públicos que las de València y Castellón. En el primer caso, los ingresos por actividades públicas ascendieron durante el año auditado a 6.983.187 euros, lo que representa un 67,1%, mientras que en el de Castellón, ese porcentaje se redujo bastante más, hasta solo el 37,2%, con 1.593.285 euros. Esta menor dependencia se explica en el mayor peso que tienen los ingresos privados procedentes de conceptos como los alquileres o la emisión de certificados.

Mejores resultados

Las cuentas presentadas, por otro lado, también revelan que las tres cámaras de la provincia de Alicante lograron mejorar resultados con relación a 2020, un año que estuvo fuertemente marcado por la pandemia. Así, Alicante pasó de 13.047 euros a 146.576; Alcoy, de 49.924 euros a 134.601; y Orihuela, de 112.455 euros a 139.906.

En su informe de fiscalización, la Sindicatura de Comptes afirma haber podido comprobar la adecuada formalización, aprobación y rendición de las cuentas anuales tanto de las cámaras como de su consejo. Asimismo, ha constatado que la gestión de las cantidades percibidas por las entidades camerales de la Generalitat resulta conforme con la normativa aplicable en todos los aspectos significativos, dado que no se han puesto de manifiesto incumplimientos relevantes de la misma.

Petición de mayor información en las memorias justificadas

La Sindicatura de Comptes, pese a no haber detectado deficiencias significativas en las cuentas de las cámaras de comercio de la Comunidad Valenciana, sí recomienda aportar mayor información en las memorias justificativas.

Así, el informe plantea que en las memorias de los convenios para la recepción de subvenciones se incluya una relación detallada de otros ingresos o ayudas que hayan financiado cada actividad, especialmente cuando exista cofinanciación comunitaria, con indicación de su importe y procedencia, en aplicación de lo que establece la normativa vigente.

La Sindicatura también considera que deberían contener un análisis real del impacto de las actividades y actuaciones realizadas, así como una evaluación de lo resultados obtenidos gracias a su ejecución.

Finalmente, plantea la necesidad de promover todas las actuaciones necesarias para que los convenios se puedan suscribir en el primer trimestre del año de su aplicación, siempre con la finalidad de garantizar una gestión adecuada.