Las vacantes de empleo se disparan un 116% en la Comunidad Valenciana en tres años

La elevada demanda de trabajadores propicia que haya 19.194 plazas sin cubrir. La falta de formación adecuada, la precariedad de algunos puestos y el aumento de costes que soportan las empresas son factores que están influyendo

Aspirantes a un empleo público en un examen correspondiente a una convocatoria de oposiciones.

Aspirantes a un empleo público en un examen correspondiente a una convocatoria de oposiciones. / Eduardo Ripoll

M. Vilaplana

M. Vilaplana

A simple vista supone una contradicción que habiendo 339.295 personas en el paro se contabilicen en estos momentos 19.194 puestos de trabajo sin cubrir. Pero esa es la realidad de la Comunidad Valenciana, territorio en el que el número de vacantes se ha disparado un 116% en los últimos tres años, desde antes de que irrumpiera la pandemia, lo que ha llevado a este territorio a ser el segundo del conjunto de España en el que más se han incrementado, solo por detrás de Asturias, y el tercero con más, sólo por detrás de Cataluña y Madrid. La principal de las razones hay que buscarla en la elevada demanda de trabajadores, toda vez que a lo largo de este año se han llegado a ofertar hasta 190.599 plazas, sin que se hayan encontrado los perfiles adecuados para poder cubrirlas todas. Así, la falta de una formación adecuada, la precariedad de algunos empleos y el aumento de costes que soportan las empresas son factores que han influido en este fenómeno. También la escasez de convocatorias de empleo público está teniendo una repercusión directa, toda vez que hay numerosas vacantes de la Administración que continúan sin cubrirse.

La última encuesta sobre vacantes de empleo publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondiente al tercer trimestre de este año, revela que el pasado septiembre los puestos de trabajo sin cubrir se situaron en el conjunto de España en 143.876, lo que supone un crecimiento del 38,1% con relación al mismo trimestre de 2019, antes de la llegada de la crisis del covid. El mismo informe revela que las vacantes han aumentado en 14 de las 17 comunidades autónomas, y que es la valenciana la segunda autonomía con un crecimiento porcentual más elevado, al haber pasado en este periodo de 8.873 a 19.194. Por delante se sitúa el Principado de Asturias, con un aumento del 131,44% que deja la cifra total en 2.856; mientras que en el tercer puesto aparece Canarias con un 75,8% y 5.631 vacantes; y Galicia, con un 66,29% y 4.651. Las únicas comunidades en las que se han registrado descensos son Cantabria, con una bajada del 56,73% que sitúa el balance en 408; La Rioja, con un descenso del 29,91% y un registro de 396; y Extremadura, con una reducción del 2,31% y 1.059.

Por sectores

El INE solo ofrece datos por sectores a nivel nacional, aunque suponen un buen indicador de aquellas profesiones en las que hay más puestos de trabajo sin cubrir. A la cabeza se sitúa la Administración Pública y Defensa, con 45.427 vacantes, lo que indica que, pese ha haberse convocado oposiciones, estas todavía continúan siendo insuficientes. En este mismo apartado se pueden incluir las actividades sanitarias y de servicios sociales, con 13.607, y la educación, con 5.623. También destaca el comercio y la reparación de vehículos, con 21.117; las actividades administrativas y servicios auxiliares, con 9.667; la información y las comunicaciones, con 7.936; la industria manufacturera, con 6.794; el transporte y el almacenamiento, con 5.882; y la hostelería, con un total de 5.683. En el lado contrario se sitúan dos sectores con una fuerte actividad en estos momentos, como son el suministro de energía eléctrica y las actividades inmobiliarias, donde no hay puestos de trabajo sin cubrir.

A la hora de buscar las razones concretas de esta situación, hay que hacer referencia, en primer lugar, a la enorme demanda de empleo que existe en la actualidad. Así lo señala el director general de Adecco en la zona de Levante, Víctor Tatay, quien destaca que en el último año han sido publicadas en la Comunidad Valenciana más de 190.000 ofertas de empleo, de las que un 13,7% corresponden al sector comercial y de ventas, un 12,7% al de ingeniería, un 10% al de la hostelería y la restauración, un 9% a logística y distribución, un 5,8% al comercio, un 5,7% a la industria y un porcentaje idéntico a tecnologías.

«La primera conclusión a la que podemos llegar es que hay muchas vacantes porque hay una oferta de empleo que podríamos calificar de desmesurada. De hecho, casi se podría decir que, en este último año, quien quería trabajar ha terminado trabajando», subraya Tatay, quien, no obstante, también introduce algunos matices. Según sus palabras, uno de los factores que propician que no se estén cubriendo las vacantes es que hay escasez en algunos perfiles, como pueden ser carretilleros para logística, ingenieros, arquitectos, expertos en ciberseguridad e, incluso, fontaneros, camareros y cocineros. «En algunos casos -explica- no se encuentran porque no hay suficiente gente formada, y, en otros, porque las condiciones que se ofrecen no llegan a ser atractivas en cuestiones como las remuneraciones o los horarios». En este sentido, añade, hay empresas que pueden permitirse mejorar sus ofertas, «pero hay otras -enfatiza- a las que les resulta casi imposible».

Clientes en un comercio de ropa de Benidorm, sector que aglutina una gran parte de las vacantes.

Clientes en un comercio de ropa de Benidorm, sector que aglutina una gran parte de las vacantes. / David Revenga

Incertidumbre

Por su parte, la catedrática de Análisis Económico Aplicado de la Universidad de Alicante (UA) Paloma Taltavull apunta a otro factor que estaría influyendo directamente en el hecho de que se estén incrementado las vacantes, y no es otro que el actual contexto de inestabilidad. «La situación por la que se está atravesando -subraya- es de una gran incertidumbre, hasta tal punto que lo que está sucediendo con el empleo se encuentra íntimamente conectado con el aumento generalizado de los costes a los que tienen que hacer frente las empresas, también los propios de la contratación». Para Taltavull, además, el número creciente de plazas sin cubrir está teniendo otras repercusiones en el contexto laboral, como es un incremento de las horas de trabajo.

¿Y qué es lo que opinan sobre todo esto los sindicatos? El secretario de CC OO en l’Alacantí-Les Marines, Paco García, considera urgente realizar estudios pormenorizados que sirvan para detallar las razones concretas por los que en una provincia como la de Alicante, que tiene una cifra de parados por encima de la media estatal, con 140.656, también haya tantas plazas sin cubrir. «Hablamos -explica- de dos cosas aparentemente incompatibles, y por eso hemos estado solicitando este tipo de informes en el seno del Consejo Económico y Social de la Provincia, y también a instituciones como Ineca».

Para el dirigente sindical, resulta del todo imprescindible contar con un diagnóstico que permita anticipar las necesidades futuras de las empresas, sobre todo en sectores especializados que se encuentran en una fase de crecimiento importante, como el desarrollo de energías renovables, entre otros. García, además, considera vital conocer estas necesidades para acometer planes específicos de Formación Profesional.

Otra cuestión que hay que abordar, añade, es la mejora de las condiciones laborales, poniendo como ejemplo el de los camareros. «A un trabajador no le compensa aceptar un puesto de trabajo cuando todo lo que gana lo tiene que invertir en los desplazamientos y los alojamientos». 

Desde este sindicato también se destaca que uno de los problemas es la falta de formación en el seno de las empresas, lo que impide a los trabajadores optar a puestos de mayor capacitación y hacer frente al problema del relevo generacional.

Servicios públicos de empleo

En parecidos términos se expresa la secretaria de UGT en la misma demarcación, Yaissel Sánchez, quien reclama a las empresas que acudan a los servicios públicos de empleo para poner en evidencia sus necesidades. «Eso contribuiría a hacer frente al problema de forma objetiva, adaptando las políticas de formación para responder de manera que se ajuste a la realidad. Es necesaria una comunicación fluida entre ambas partes», apostilla.

Además, coincide con su homólogo de CC OO en que resulta imprescindible mejorar las condiciones. «La gente quiere trabajar, pero no que se la explote. Al final hay que compatibilizar la vida personal y laboral, y, para ello, en muchos casos, basta con que se cumpla la legislación», apunta.

Ambos sindicatos, por último, reclaman a la Administración pública que realice las oportunas convocatorias de empleo para cubrir las plazas de los trabajadores que se jubilan y poder regresar, de esta forma, a las ratios de años anteriores.