La mitad de quienes trabajan a través de plataformas digitales gana menos del Salario Mínimo a la hora

Aunque las más conocidas son las que se dedican al reparto de comida a domicilio, como Glovo o Justeat, las hay de todo tipo: desde las que permiten contratar a un fontanero, hasta recibir clases de inglés o encargar el diseño de un póster. La cifra de plataformas digitales que ofrecen todo tipo de servicios no deja de crecer y se han convertido en una importante alternativa laboral para miles de profesionales, que encuentran en ellas una oportunidad laboral más flexible, una forma de complementar sus ingresos o, simplemente, una manera de ganarse la vida, con frecuencia, a la espera de un empleo mejor.

Porque, de momento y a pesar de lo que predican los defensores de la digitalización, lo cierto es que trabajar a través de una de estas plataformas no resulta demasiado rentable. Así, casi la mitad de quienes lo hacen ganan menos ochos euros la hora, después de descontar gastos, es decir, menos de lo que establece el Salario Mínimo Interprofesional.

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Así lo revela el estudio El trabajo en las plataformas digitales en la Comunitat Valenciana, que han dirigido los profesores Adrián Todolí y José María Peiró para Labora, el Servicio Valenciano de Formación y Ocupación. Un informe que ha presentado este viernes el secretario autonómico de Empleo, Enric Nomdedéu, y que actualiza los datos del que se elaboró hace un año con el mismo propósito de conocer el impacto de estas nuevas modalidades de empleo.

En este tiempo, el número de trabajadores de estas plataformas –considerando como tales a los que han ganado dinero a través de ellas con un frecuencia mínima de una vez al mes- se ha incrementado un 10%, hasta el punto de que ya suponen el 13,3% de todos los trabajadores.

Para la mayoría de ellos supone una fuente de ingresos secundaria. En concreto, al 59,5% le aporta menos del 25% de todo lo que ganan y para otro 22,9%, entre el 25% y el 50% de sus ingresos. Sólo un 14,2% señala que supone su principal forma de ganarse la vida, frente a otro 3,4% que no sabe cuantificarla.

Eso sí, sea cual sea el caso, la rentabilidad es más que cuestionable. Así, hasta el 49,9% señala que gana menos de ocho euros por cada hora de trabajo a través de estas plataformas, es decir, menos del equivalente al SMI. Otro 47,2% asegura ingresar entre 8 y 20 euros, y sólo un 3% afirma ganar más de esa cantidad.

También cabe destacar la importante brecha de género que existe, ya que quienes no llegan al SMI entre los varones se reduce al 45,4%, mientras que la cifra se dispara entre las mujeres hasta el 57,7%.

Aunque muchos asocien el concepto de plataforma digital a los repartidores a domicilio que proliferan en las ciudades, lo cierto es que éstos suponen un porcentaje muy pequeño del total de quienes trabajan a través de estas webs y aplicaciones, apenas un 4,6%. Por el contrario, los más numerosos son los que se dedican al multimedia y el trabajo creativo online, que suman un 18,4%; seguidos por los que realizan tareas administrativas (15,4%) y los dedicados a ventas y soporte comercial (10,6%).

El estudio también constata cierta mejora en las condiciones laborales de estos profesionales, más allá del tema de la remuneración. Así las medidas de presión contra los falsos autónomos han elevado la cifra de trabajadores que están contratados por las plataformas, que suben del 23,2% al 35,1% en un año. Aun así, los autores señalan que el porcentaje de autónomos entre este colectivo sigue siendo mucho más elevado que entre el resto de trabajadores, lo que da indicios de que se siguen produciendo situaciones de abusos.

Por otro lado, aumentan los trabajadores de plataformas digitales que consideran que tienen riesgos de sufrir agresiones, un 58,1%; o que pueden acabar con problemas de salud, como dolor de espalda o depresión, un 45,2%. También es significativo que un 45,2% crea que su trabajo implica riesgos de situaciones de acoso sexual.