Llenar el depósito ya cuesta en Alicante 15 euros más que a final de año

La supresión del descuento de 20 céntimos se suma a un nuevo repunte de los carburantes, que llega a los 7,5 céntimos en el caso de la gasolina

Surtidores en una estación de servicio de Alicante.

Surtidores en una estación de servicio de Alicante. / Pilar Cortés

David Navarro

David Navarro

Los conductores vuelven a echar cuentas antes de repostar. La supresión del descuento de 20 céntimos por parte del Gobierno ha coincidido con un nuevo repunte de los precios de los carburantes –especialmente en el caso de la gasolina-, lo que ha supuesto que en menos de un mes pasar por una estación de servicio se haya encarecido en la práctica alrededor de un 20%. O, lo que es lo mismo, que llenar el depósito de un turismo de gasoil, que suele tener 55 litros, cueste ahora 13,5 euros más que el pasado 31 de diciembre, una cifra que se dispara por encima de los 15 euros en el caso de la gasolina 95.

Una situación que no ha pasado inadvertida para las asociaciones de consumidores, que creen que la medida se suprimió demasiado pronto y, sobre todo, que los hogares han salido perdiendo con el cambio de ese descuento por la bajada del IVA de algunos alimentos, que supone un ahorro bastante inferior, tal y como recalca el presidente de Avacu, Fernando Móner, de apenas dos o tres euros por compra.

En el caso de la gasolina 95, el precio oficial que marcan los postes de las estaciones de servicio ha pasado en este tiempo de 1,591 euros por litro a los 1,666 euros del pasado domingo, de acuerdo con los datos que recopila el Ministerio para la Transición Ecológica. Una subida de 7,5 céntimos, que hay que sumar a los 20 que ya no se descuentan, lo que en la práctica supone una subida del 19,7% sobre final de año. También se trata de un precio un 8% superior a lo que se pagaba en las mismas fechas de 2022, aunque queda lejos de los 1,822 que marcó tras el inicio de la guerra de Ucrania, o el máximo de más de 2,114 euros que alcanzó en verano.

Las estaciones de servicio con los precios más baratos este martes.

Las estaciones de servicio con los precios más baratos este martes. / Geoportal gasolineras

Por su parte, el gasóleo A habitual se ha encarecido en poste de 1,661 a 1,702 euros, que sumado a la desaparición del descuento, supone una subida del 16,4%. Un incremento muy similar al registrado en términos interanuales ya que hay que recordar que este combustible es el más afectado por el corte de suministro desde Rusia –lo que ha provocado que se sitúe por encima de la gasolina, frente a lo que siempre ha sido habitual- y, de hecho, los analistas prevén un nuevo repunte de su precio con las sanciones adicionales contra el régimen de Putin que entran en vigor en febrero.

Las estaciones de servicio con el gasóleo A más barato este martes.

Las estaciones de servicio con el gasóleo A más barato este martes. / Geoportal gasolineras

A pesar de la subida, las estaciones de servicio tampoco han tenido un buen mes. Muchos conductores aprovecharon los últimos días del descuento para llenar los depósitos, lo que provocó que un desplome de las ventas en las primeras semanas del año. Con el paso de los días la situación ha tendido a normalizarse, aunque los volúmenes servidos siguen por debajo de los niveles prepandemia, según afirma el presidente de la Asociación Provincial de Estaciones de Servicio, Emilio Córcoles, que apunta a causas más profundas. "Ha habido un cambio de costumbres. Los jóvenes conducen menos y, con la inflación, mucha gente usa más el transporte público o se comparten los coches para ahorrar", señala Córcoles.

Para el presidente de Avacu, Fernando Móner, el Gobierno se ha precipitado en su decisión de acabar con el descuento generalizado –aunque se mantiene para el transporte, la agricultura y la pesca- y cree que debería haber esperado a que el IPC se estabilizara entorno al 3% o 4%. «El que tiene que coger el coche para ir a trabajar, que es mucha gente, lo ha notado en el bolsillo. Se intentó vender que se iba a compensar con la bajada del IVA de los alimentos, pero la repercusión de esta bajada es mucho menor», insiste el representante de los consumidores. De momento, la decisión ya ha provocado que el IPC corrigiera la senda a la baja de los últimos meses y repuntara una décima en enero.

Un sistema más farragoso para los profesionales

Los únicos que mantienen el descuento de 20 céntimos desde el pasado 1 de enero son los transportistas, los agricultores y los pescadores, pero ha cambiado la forma de aplicarlo. Así, frente a la rebaja directa que se obtenía al repostar, ahora los profesionales deben solicitar la devolución del dinero a la Agencia Tributaria. "Valoramos positivamente que se mantenga pero la verdad es que el sistema resulta farragoso y hemos tenido que dedicar a una persona en exclusiva a atender todas las dudas de los asociados", explica el secretario general de la patronal alicantina del transporte Fetrama, Francisco Ortiz. Para empezar, los 20 céntimos solo se descuentan a los vehículos de 7.500 o más kilos de masa máxima autorizada, mientras que los inferiores a esa categoría solo recibirán una cantidad fija en los próximos meses. Además, para cobrarlo hay que darse de alta en la aplicación que tiene la Agencia Tributaria para el descuento del gasóleo profesional, algo que muchos transportistas no habían hecho todavía. Igualmente, este descuento solo se aplica a las empresas que realizan portes, y no puede aplicarse a las flotas para transporte propio.