Puig instituye el Día de la Empresa en plena escalada de los ataques de Podemos

El jefe del Consell reivindica el papel de los empresarios en la economía y el empleo, mientras Illueca censura que se quiera reforzar su protagonismo

Ximo Puig se ha reunido con Salvador Navarro y la secretaria general de la CEV, Esther Guilabert.

Ximo Puig se ha reunido con Salvador Navarro y la secretaria general de la CEV, Esther Guilabert.

M. Vilaplana

M. Vilaplana

Los empresarios han encontrado en el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, un aliado con el que hacer frente a las críticas que les llegan desde Podemos. Si el miércoles les mostraba su respaldo público en la asamblea de AVE, este jueves anunciaba la creación, a solicitud de la propia patronal, del Día de la Empresa de la Comunidad Valenciana. Un gesto para reivindicar, según dijo, el papel que el empresariado desempeña en la economía y el empleo. El anuncio, lejos de desactivar los ataques morados, no hizo otra cosa que reforzarlos, toda vez que el vicepresidente segundo y conseller de Vivienda, Héctor Illueca, censuró que haya un intento «anómalo» de reforzar el protagonismo empresarial.

Todo empezó con unas críticas vertidas por la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, contra el presidente de Mercadona, Juan Roig, por el precio de los alimentos. A partir de ahí los reproches de los morados hacia el colectivo empresarial se han ido sucediendo, también desde las filas de la formación en la Comunidad Valenciana, un hecho que no ha pasado desapercibido para Ximo Puig, que está tratando de desmarcarse de esta ofensiva.

Así sucedió en la asamblea de Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), donde calificó de «injusto y falaz» que se pretenda caricaturizar a los patronos como «el ricachón del Monopoly», y continuó este jueves con el anunció de que el pleno del Consell va a aprobar la declaración del 3 de marzo como Día de la Empresa en la Comunidad. Es una petición que fue formulada en su momento por la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV), y cuya celebración se hará coincidir con la fecha de constitución de esta organización.

Puig realizó este anuncio tras mantener una reunión con el presidente de la propia CEV, Salvador Navarro, y su secretaria general, Esther Guilabert, y justificó la decisión argumentando que «la empresa es un operador fundamental tanto para la actividad económica como para el empleo, y los empresarios, junto a los trabajadores, son los que hacen posible que la economía funcione y que la sociedad progrese». En este sentido, también quiso dejar claro que la Generalitat «está al lado de la empresa», reivindicando, asimismo, el diálogo social entre empresarios, trabajadores y sindicatos, «que ha generado grandes resultados y mucha estabilidad en la Comunidad».

Escasos minutos después de hacerse público este anuncio, era Héctor Illueca el que no solo insistía en sus críticas, sino que las elevaba un escalón más. Sin hacer referencia expresa a la declaración del Día de la Empresa, sí que aludía a la asamblea de AVE a la que asistió Ximo Puig, indicando que puso de manifiesto «el intento inédito y anómalo de reforzar el protagonismo de los empresarios en la vida democrática». A juicio del vicepresidente del Consell, dicho intento oculta «el gran debate prohibido», que, asevera, no es otra cosa que, «cuando los empresarios pierden, hay que financiarles, pero cuando ganan no pueden detraerse de sus beneficios, establecer limitaciones en los precios o aceptar una política fiscal progresiva en la que las rentas altas pagan más». Además, señaló que, cuando se pretende imponer ese protagonismo de los empresarios, «lo que se trata es de ocultar el protagonismo real de los trabajadores en la economía».

Redes sociales

Las críticas de Illueca contra la asamblea de AVE, con todo, habían arrancado a primera hora de la mañana, cuando, a través de las redes sociales, insistía en calificar la actitud de las grandes empresas como «capitalismo despiadado», por no redistribuir la riqueza. El mensaje en cuestión fue difundido posteriormente por la secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra; por el portavoz del partido en el Congreso, Pablo Echenique; y por el exvicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias.

La CEV atribuye las críticas moradas al clima electoral

El presidente de la CEV, Salvador Navarro, agradeció la «sensibilidad» mostrada por la Generalitat al aceptar la creación del Día de la Empresa, y restó importancia a las críticas de Podemos, atribuyéndolas al «clima electoral». Con relación a las declaraciones de Héctor Illueca, señaló que «me imagino que le habrán llegado instrucciones desde Madrid, con lo que ya tenemos una nueva dependencia».