Acuerdo en el ERE de la marmolera Levantina tras reducir a 186 el número de despidos

La compañía pagará una indemnización de 25 días por año trabajado, con un máximo de 13 mensualidades

La fábrica de mármol de Levantina en Novelda.

La fábrica de mármol de Levantina en Novelda. / Áxel Álvarez

David Navarro

David Navarro

La plantilla de Levantina ha dado luz verde este jueves, por amplia mayoría, al acuerdo negociado entre los sindicatos y la dirección de la marmolera sobre el ERE presentado por la compañía. Un acuerdo que ha sido posible después de que la empresa haya reducido considerablemente el número inicial de despidos que presentó, según confirman fuentes tanto de CC OO, como de la propia firma.

De esta forma, finalmente serán 186 los trabajadores afectados frente a los 244 de la primera propuesta de la compañía. En concreto, el acuerdo supone que saldrán de las canteras de Monte Coto, Losares (Albacete) y Vallanca (Valencia) un total de 63 personas -24 menos de las previstas-, con lo que se mantendrá una plantilla de 107 empleados.

Por su parte, en la planta de mármol de Novelda finalmente serán 123 los trabajadores despedidos -34 menos de la propuesta inicial-, por lo que se conservarán un total de 78 empleos.

La reducción también ha sido posible, en parte, gracias a la recolocación de otros seis trabajadores, que ya han pasado a depender de Techlam, la división del grupo dedicada a la fabricación de piedra sinterizada -losas porcelánicas de grandes dimensiones- que no se ve afectada por el ERE.

Indemnizaciones

En cuanto a las indemnizaciones, finalmente los afectados cobrarán 25 días por año trabajado, con un tope de 13 mensualidades, frente a los 20 días por año y 12 meses que establece la legislación como mínimo en estos casos. A la cifra resultante se añadirá, además, un extra por los 15 días de preaviso, ya que la compañía pretende que las salidas se hagan de forma inmediata.

La compañía también sufragará el convenio especial con la Seguridad Social para los despedidos que superen los 55 años, de forma que, si no encuentran un nuevo empleo, no vean reducidas sus cotizaciones tras finalizar la prestación por desempleo, y puedan mantener la cuantía de sus pensiones. Igualmente, se contratará a una empresa especializada para poner en marcha medidas de acompañamiento para los afectados y ayudarles en la búsqueda de nuevos empleos, tal y como marca la legislación.

El interior de la fábrica de Levantina en Novelda, en una imagen de archivo.

El interior de la fábrica de Levantina en Novelda, en una imagen de archivo. / INFORMACIÓN

A pesar de las mejoras, lo cierto es que el ERE supondrá la salida de prácticamente la mitad de la plantilla de las divisiones de Levantina afectadas -la de canteras y la de producción de mármol-, un "sacrificio", con el que los sindicatos esperan que la compañía pueda enderezar su situación y encontrar la viabilidad, según explica el representante de CC OO, Miguel Ángel Mira.

Lo cierto es que en los últimos años Levantina ha acumulado importantes pérdidas, ante la caída del mercado del mármol, sobre todo de los colores que se producen en la provincia, como el crema marfil, que no se adaptan a los gustos actuales mayoritarios de los consumidores. De hecho, la firma prevé cerrar de nuevo el ejercicio en números rojos este año, tras los 4,5 millones que ya registró en 2023 o los 16 millones de 2022.

En principio, la empresa ha abierto un periodo hasta el próximo lunes para que se presenten voluntarios, aunque la dirección se ha reservado la última palabra sobre el personal que saldrá de la empresa.

Viabilidad

Por su parte, desde la empresa han agradecido la voluntad de negociación de los representantes de la plantilla que, según afirman, ha permitido "minimizar el impacto en el empleo. "El compromiso alcanzado garantiza la aplicación del plan de viabilidad de la compañía con unas altas probabilidades de éxito, lo que permitirá consolidar los puestos de trabajo que se han mantenido y continuar creando riqueza en la región", aseguran desde la firma.

En principio, el objetivo sería reducir la producción para focalizarse en el producto de mayor calidad, que tiene también mayores márgenes. Esto permitiría recuperar la rentabilidad y volver a crecer.

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