Ni quedar con los amigos ni comprar ropa: 185.000 alicantinos sufren privaciones materiales severas
La inflación y el encarecimiento de las hipotecas elevan la cifra de personas que se retrasa en el pago de los recibos y cerca de dos de cada cinco no puede afrontar gastos imprevistos

Pilar Cortés
El fuerte crecimiento económico registrado en los últimos años no está llegando a toda la población por igual. A pesar del considerable aumento que experimentó la renta media de los hogares de la Comunidad Valenciana durante el año pasado -que se sitúa ya en 33.031 euros anuales, un 5,4% más-, el desigual reparto de esa riqueza provocó que el porcentaje de población en riesgo de pobreza o exclusión social en la autonomía también se incrementara, hasta alcanzar el 29,9% del total, tres décimas más.
Todo un contrasentido, especialmente si se tiene en cuenta que a nivel nacional la mejora de los ingresos medios sí que sirvió para reducir este indicador, que bajó hasta el 25,8%, siete décimas menos que el año anterior, según la Encuesta de Condiciones de Vida publicada este jueves por el INE.
Una situación que la catedrática de Economia de la UA Paloma Taltavull no duda en vincular directamente con los efectos acumulados de la inflación y la subida de tipos y, sobre todo, con el menor nivel de riqueza que presentan las familias de la región. "La clase media valenciana está mucho más cerca del umbral de riesgo de pobreza que la del resto del país y eso la hace más vulnerable ante cualquier shock de precios, como el que se ha producido", explica la experta. Es decir, que tiene menos capacidad de reacción ante un encarecimiento de la vida, sobre todo porque los salarios suelen tardar en actualizarse para compensar la inflacion.
Una situación que se hace especialmente evidente en el aumento que ha registrado la población que sufre carencia material severa, lo que significa que tiene problemas para afrontar hasta siete de una lista de 13 gastos corrientes que analiza el estudio del INE. Así, en el último año el porcentaje de residentes de la autonomía que se encuentra en esta situación ha aumentado del 8,3% al 9,1% del total. Un porcentaje que trasladado a la provincia significa que cerca de 185.000 alicantinos deben convivir en su día a día con privaciones severas, 16.000 más que hace un año.
Sin ocio
Por ejemplo, entre estas privaciones, la encuesta recoge que hasta un 15,9% de los alicantinos no se puede permitir participar regularmente en actividades de ocio, lo que supone unas 322.000 personas con este problema, y que un 9,3% -188.000 alicantinos- no tiene dinero suficiente para quedar al menos una vez al mes con amigos o familiares.
Más llamativo aún resulta que cerca de 210.000 alicantinos (un 10,3 %) no puede comprar ropa nueva para sustituir la que ya está desgastada y 67.000 (3,3%) no disponga de al menos dos pares de zapatos en condiciones.

Un contenedor para realizar donaciones de ropa. / Áxel Álvarez
Con todo, la cifra más dura es la de los 120.000 empadronados en la provincia que no tienen recursos para realizar una comida de carne o pescado al menos cada dos días, aunque en este caso hay que conceder que el porcentaje de afectados se ha reducido algo, al caer del 6,6 % al 5,9 % de la población, aun así, una cifra escandalosa.
Como era de prever por la evolución de los precios y de los tipos de interés, las situaciones problemáticas que más han aumentado son las relacionadas con la vivienda. Durante el año pasado más de 288.000 alicantinos (el 14,2%, casi cuatro puntos más que el año anterior) tuvieron retrasos en el pago de algún recibo relacionado con el hogar (hipoteca, luz, gas, comunidad) y la cifra aumenta hasta los 322.000 si se incluyen los que tuvieron problemas para pagar alguna compra a plazo.
Gastos imprevistos
En términos generales, hasta 785.000 alicantinos -el 38,7 %- carece de un colchón de dinero con el que afrontar posibles gastos imprevistos, una cifra muy similar a la de aquellos que no pueden permitirse al menos una semana al año de vacaciones.
La dicotomía entre el aumento de la renta y el aumento de la riqueza también se observa en la facilidad con la que los hogares llegan a final de mes. En términos globales, el porcentaje de los que tienen alguna dificultad se ha reducido de. 51,2 % al 49,6%. Sin embargo, si se analiza los que tienen "muchas dificultades" para pagar todos sus gastos mensuales van en aumento y alcanzan el 8,4% del total, 1,5 puntos más que un año antes, lo que traducido a personas significa que este año llegan a final de mes con mucho apuro 30.000 alicantinos más que en 2023.
En este sentido, el sociólogo Carlos Gómez Gil, alerta de las bolsas de pobreza que persisten en la autonomía y que parecen haberse convertido en perennes. "La población en pobreza severa es la mayor preocupación en esta Comunidad porque es una población muy cronificada a la que no llega la recuperación económica, y posiblemente tampoco accedan a otros dispositivos sociales de reducción de pobreza, ni a nivel local ni autonómico", asegura el experto.
- Malas noticias de Hacienda: a partir de ahora, hay que declarar los pagos con tarjeta si superan esta cantidad
- Si compras en Shein, Temu o Amazon, atento a la nueva estafa del paquete
- Nuevo requisito para vender o alquilar una vivienda en España: será obligatorio a partir de esta fecha
- ¿Cómo funciona la cápsula endoscópica magnética? La alternativa no invasiva a la endoscopia tradicional
- Multas de hasta 135 euros por ir solo en el coche: la novedad que plantea la DGT y que debes tener en cuenta
- Regalo de Hacienda a los hipotecados: 2.000 euros si firmaste antes de esta fecha
- Hacienda va a por Bizum: a partir de esta cifra hay que declararlos
- El BBVA sostiene que la probabilidad de que su opa sobre el Sabadell triunfe es 'muy, muy alta