Juan José Cejudo y José María Ayús cuentan que querían comprar varios SAI para su empresa -las baterías que evitan que se apaguen de golpe los sistemas informáticos cuando hay un corte de luz-, pero no les convencían los precios. Recordaban haberlos visto más baratos y no estaban dispuestos a pagar de más, por lo que preferían esperar a que volvieran a bajar de precio o hubiera una oferta. El problema era cómo saber en qué momento se iba a producir esa bajada.
Ni cortos ni perezosos, siendo ambos desarrolladores de software, decidieron crear un pequeño programa que rastrease el producto en Amazon y les avisara. Fue entonces cuando pensaron que aquella idea podía tener más recorrido, que miles de personas se enfrentaban a ese mismo dilema cada día al entrar en el popular marketplace para realizar sus compras y que ayudarlas podía convertirse también en un buen negocio.
Así fue como crearon AZBox, que nació primero como una extensión para el navegador Chrome y más tarde se convirtió en una aplicación para el móvil, en la que ya cuentan con unos 6.000 usuarios activos, según explican sus fundadores.
La "mentira" del Black Friday
La iniciativa recibió un espaldarazo definitivo cuando consiguieron una considerable atención mediática con el estudio que realizaron sobre el Black Friday, que puso de relieve los descuentos ficticios que aplican muchos vendedores. En concreto, el seguimiento que realiza la aplicación permitió comprobar que el 73% de los productos que se ofertan en Amazon subían de precio en los días o semanas anteriores a la promoción, para después ofrecer la sensación de que el descuento durante ese día era mayor del real.
«Es algo que hemos visto cada vez que hay alguna fecha señalada. Se ha convertido en una forma más de promoción y los vendedores lo hacen sin cortarse un pelo», señala Cejudo, que destaca que se trata de una estrategia poco ética.
Lo que permite AZBox es, precisamente, realizar un seguimiento de los productos que le interesan al usuario. Tras descargarse la aplicación, basta con añadir a la cesta el móvil, la batidora o los pantalones que se quiere comprar y la aplicación avisará cuando bajen de precio. La app es gratuita y sin publicidad, y se rentabiliza con la comisión que reciben por las compras que se realizan a través de los enlaces de los productos.
Subidas en Navidad
Con base en los datos que han recopilado en el tiempo que llevan desarrollando la aplicación, Cejudo y Ayús señalan que el momento del año en que realmente los precios están más bajos en Amazon es durante los meses de verano, «cuando la gente está de vacaciones y cae considerablemente la demanda, por lo que los vendedores necesitan animar el negocio». También se nota un descenso real en enero, coincidiendo con las rebajas.
Por el contrario, una vez superado el Black Friday, no parece buena idea comprar ese robot aspirador o el nuevo portátil que lleva tiempo tentándonos desde la web. Como ocurre con los alimentos más típicos por estas fechas, también en Amazon se observa una subida paulatina de precios a medida que se aproximan las fiestas, según explican los también fundadores de SEOBox, la otra iniciativa en el que trabajan José María Ayús y Juan José Cejudo, en este caso, especializada en el desarrollo de software para posicionamiento SEO y marketing digital.
De cara al futuro, Ayús y Cejudo tienen claro que lo prioritario es seguir aumentando su base de usuarios. Para ello, sus siguientes movimientos pasan por incluir nuevos marketplace -ahora sólo siguen los precios de Amazon-, por lo que ya trabajan para monitorizar también los productos de Aliexpress, aunque en paralelo están mirando otros sitios españoles. Además, otra de las tareas pendientes es la traducción de la app al inglés, con lo que esperan expandir considerablemente su público.
