Llegaron a España con sus familias huyendo de la guerra. Atrás quedaron los refugios, los sonidos de las bombas y el angustioso miedo que se les metió en el cuerpo y que tardarán en olvidar. En El Campello han encontrado la paz que se merece todo el mundo, han sido escolarizados y ahora aprenden nuestro idioma de forma amena y divertida.
Desde el pasado mes de abril, la concejalía de Educación imparte clases de castellano para los niños y niñas ucranianos refugiados, con dos iniciativas distintas pero con un mismo objetivo: clases de lengua directamente, que imparte Ángela Heredia, y dibujo creativo, que les hace avanzar en el aprendizaje de forma amena de la mano del monitor Guillermo Caballero, arquitecto, dibujante y editor de libros infantiles.
En febrero comenzó a impartirse un taller de integración lingüística para estudiantes de secundaria (de 12 a 14 años), por el incremento de solicitudes de escolarización de alumnado extranjero con desconocimiento del idioma castellano en los Institutos de Educación Secundaria del municipio.
Luego, el 5 de abril, debido a la situación en Ucrania y la alta demanda, arrancó este taller intercultural para las edades de Educación Primaria (de 5 a 11 años), que se imparte en el Centro Social El Barranquet, los martes y jueves de 18:15 a 20:15 horas.
La finalidad de este programa consiste en la realización de las actividades subvencionadas por el proyecto de conciliación familiar, desarrollando la integración lingüística de los niños, niñas y jóvenes de hasta 14 años, procedentes de países extranjeros y refugiados de guerra. Dicho Programa se complementa con un taller de dibujo creativo, como cómic o manga, donde los niños y niñas aprenden a dibujar a través de técnicas motivadoras e innovadoras.
Ya son 20 niños ucranianos los que se han matriculado en las escuelas públicas de El Campello, y de ellos 15 se han apuntado a estos cursos de aprendizaje intensivo de español.
Los rostros de los pequeños y pequeñas reflejan, sobre todo, felicidad. Se ríen cuando te oyen hablar, y avanzan muy rápido en el conocimiento del castellano, de manera sorprendente. «Vuestro idioma es muy fácil», dicen. Y lo demuestran cada día al aprender más y más vocabulario. Acostumbrados a las lenguas eslavas, las románicas les parecen sencillas.
El programa tenía previsto finalizar el 21 de junio, como el calendario escolar, pero el alcalde Juanjo Berenguer y la concejala de Educación, Dorian Gomis, ya han anunciado que se mantendrá durante los meses de estío con el objetivo de que inicien el nuevo curso con un nivel más elevado d e español.
