Algo más de un centenar de jóvenes adolescentes de 10 a 14 años se apuntaron a la «Pascua Jove», una propuesta de las concejalías de Juventud que dirige Cristian Palomares (PP), y Educación, dirigida por Dorian Gomis (PP) para ofrecer actividades de todo tipo durante esa semana de vacaciones escolares.
En la «Sala Jove» se realizaron diversos talleres de ocio educativo que planteaban hacer de forma amena un aprendizaje en las nuevas tecnologías (tiktok y edición de fotos) y en arte (coreografía hip hop y graffiti).
En el Centro Social se desarrolló el taller de drones e impresión 3D, para la misma edad de población, en los que los inscritos disfrutaron y aprendieron a introducirse en el apasionante mundo de los drones y las impresiones en tres dimensiones.
No faltaron las actividades al aire libre, por lo que se diseñó un taller de skate en las instalaciones del Pumptrack, donde los chavales aprendieron con un equipo de monitores a mejorar sus habilidades.
Las actividades tuvieron una excelente acogida entre la población adolescente y las familias, que aprovecharon este programa de conciliación familiar para que sus hijos y hijas participaran durante los cinco días de Pascua.
«Semana pascuera» en el cole
Por otra parte, decenas de niños y niñas participaron en las instalaciones del colegio Pla Barraques en la «Semana pascuera de coeducación», una iniciativa que perseguía el objetivo de que los pequeños de la casa tuvieran actividades durante la semana de vacaciones mientras sus progenitores acudían al trabajo.
La convocatoria fue un éxito, con 90 inscripciones (el total de las plazas ofertadas) para niños y niñas de 3 a 11 años. La mayoría de las plazas fueron ocupadas por niños de Educación Infantil (3-5 años).
La semana se presentó como una alternativa de calidad en el tiempo libre, acompañándola del servicio de desayuno y comedor, con la finalidad de conciliar el mayor tiempo posible los horarios laborales de los padres.
A las 9 comenzaban todas las actividades de «El Poblado de la Igualdad: La Casita», imitación de un hogar donde a través de dinámicas y juegos de rol aprenden a repartir mejor las tareas del hogar y ganar tiempo para disfrutar en familia.
«El Cole» era otra de las actividades, consistente en un taller de profesiones, donde se recrean situaciones cotidianas para analizar si tienen sexo las distintas profesiones, al tiempo que se analizan los cuentos, partiendo de sus ideas y jugando con los distintos personajes y situaciones.
Los pequeños practicaron diversas tradiciones culturales, como elaboración de monas de chocolate, conejos de Pascua y huevos decorados. Las jornadas finalizaban con a las 13 horas con el catering, todo con material desechable y reciclable.
