El retraso a la solución final de la operación Gonzalo Villar tiene un «perjudicado» de forma indirecta: Dani Escriche.

El delantero cedido por el Huesca ha sido el primer fichaje del mercado de invierno, pero tiene que esperar para que su ficha sea dada de alta porque el nuevo dueño del club ilicitano prefiere realizar una venta y no tener que depositar los 700.000 euros que le exige LaLiga para poder abrir la ventana de nuevas incorporaciones.

El futbolista de Burriana se encuentra desde el pasado lunes entrenando a las órdenes de Pacheta, que ha sido uno de sus grandes valedores y el que ha insistido para que la comisión deportiva cerrase su fichaje. Escriche ya esta disponible para haber jugado el encuentro de Copa frente al Athletic Club de Bilbao, pero no tenía su licencia regularizada. Lo mismo ocurre ahora de cara al partido de Liga del domingo en Almería. La próxima semana, cuando se confirme la venta de Gonzalo Villar, LaLiga ya permitirá al Elche inscribir a jugadores y será dado de alta el delantero.

Pacheta reconocía ayer resignado que no podía contar con el nuevo futbolista franjiverde para esta semana. «Va a ser muy difícil y creo que no va a estar disponible», señalaba el entrenador que era perfectamente conocedor de que hasta que el club ilicitano no ingrese el dinero del traspaso de Villar no se podrá inscribir a Dani Escriche.