El entrenador del Elche, José Rojo, Pacheta, reconoció anoche que su equipo atraviesa el mejor momento de la temporada tras la merecida victoria ante el Málaga (2-0) -la primera en el Martínez Valero en los dos últimos meses- y destacó que el conjunto franjiverde es «un equipo humilde que juega como un grande, pero aún nos faltan 11 puntos» para alcanzar los 50 que teóricamente aseguran la permanencia virtual en Segunda. El preparador burgalés no quiso entrar a valorar los movimientos del agitado mercado invernal para no restar protagonismo a los futbolistas que ayer situaron quinto en la tabla al cuadro ilicitano, al tiempo que dedicó el triunfo a los suplentes y a los que no participan habitualmente.

«Me quedo del partido con la implicación de los que no juegan porque son los que hacen jugar bien a los que han ganado hoy [por ayer]», destacó Pacheta, para quien «la confianza» de sus jugadores es otra de las claves del gran momento que atraviesa el equipo. «Cuando van mal dadas, como tras la derrota en Gijón, somos capaces de reponernos sin variar nada y es cuando somos más insistentes en este modelo. La gran diferencia con respecto a meses atrás es que el equipo se atreve: esto nos ha traído hasta aquí y a seguir así».

Pacheta admitió que le gustó especialmente «el ambiente y el ruido» del estadio Martínez Valero, cómo festejó la hinchada la victoria, aunque volvió a hacer gala de prudencia sobre los objetivos del equipo en el tramo final de la Liga: «Estamos en un momento dulce y vamos a intentar alargarlo; es ilusionante y apasionante, pero con los pies en el suelo y tranquilos».