A falta de cinco jornadas para el final de la Liga regular en Segunda División, la clasificación registra un atasco sin precedentes en la lucha por las dos últimas plazas -quinta y sexta- que dan acceso a la promoción de ascenso a Primera División. En un «pañuelo» de apenas cuatro puntos, el Elche y otros nueve equipos aspiran a colarse en el premio final del «play-off» para abrochar con éxito esta insólita temporada marcada por el coronavirus. La lógica invita a pensar que los cuatro primeros -Cádiz, Zaragoza, Almería y Huesca- se disputarán el ascenso directo y las otras dos plazas de la fase final, la tercera y cuarta, que actualmente marcan una distancia de seis puntos sobre la otra decena de aspirantes: desde el quinto (Elche, con 52 puntos) al 14º (Las Palmas, con 47).
En el arranque de esta 37ª jornada que finaliza esta tarde (19.30) con un interesante Girona-Zaragoza, el Elche de José Rojo, Pacheta, forma parte del pelotón de cabeza de esta batalla abierta por la promoción, marcada por la igualdad, los resultados cambiantes y la dificultad para enlazar dos victorias seguidas en un calendario «infernal» y muy exigente de partidos prácticamente cada tres días, en los que es mucho más difícil preparar cada envite y prima la recuperación y el descanso sobre el trabajo físico, técnico y táctico de los equipos.
A pesar de que sus resultados no han sido buenos desde la reanudación de la competición (seis puntos de 18 posibles tras una sola victoria, tres empates y dos derrotas), los franjiverdes se han mantenido durante estas seis jornadas entre el quinto y el sexto puesto. Es uno de los conjuntos que más ha acusado el parón por el covid-19 tras llegar a un pico de forma muy alto la primera semana de marzo, pero los «pinchazos» de los rivales directos y los enfrentamientos directos entre ellos están jugando a favor de los ilicitanos, como también es previsible que suceda en los cinco partidos que quedan hasta el final.
Con el equipo de menos a más, como demostró el martes ante el líder Cádiz (0-0) con un encuentro muy serio, el calendario del Elche invita al optimismo. El conjunto ilicitano visita este sábado (17.00) al colista Racing de Santander, al filo del descenso matemático ya a Segunda B. No puede fallar en El Sardinero el grupo de Pacheta, que el martes (19.30) visitará en Anduva a un meritorio Mirandés, un recién ascendido que se ha colado por derecho propio, como los franjiverdes, en esta lucha por el «play-off», aunque su derrota el miércoles (1-0) en Oviedo ha frenado su progresión.
Tras su paso por Anduva, el Elche tendrá por primera vez en esta «mini-temporada» seis días para preparar el partido de la 40ª y antepenúltima jornada, que se jugará el lunes 13 en el Martínez Valero ante el Albacete, un conjunto que lucha por la salvación. Para cerrar la competición regular, el Elche visitará a continuación al Fuenlabrada, una de las sensaciones del curso, y recibirá en el último partido al Oviedo, otro de los inmersos en la pelea por la permanencia.
Junto al Elche, la nómina de aspirantes a estas dos últimas plazas de promoción la completan el Girona, Alcorcón, Fuenlabrada, Tenerife, Rayo Vallecano, Sporting de Gijón, Mirandés, Ponferradina y Las Palmas.
