El ascenso del Elche a Primera División también va a llevar consigo el cambio del lugar de entrenamiento. El conjunto ilicitano dejará el polideportivo de Altabix, donde terminó ejercitándose la temporada pasada después de que los campos anexos al Martínez Valero pasaran a la empresa propietaria, que ha comenzado la construcción de un centro comercial y se trasladará al campo Díez Iborra de la Ciudad Deportiva Juan Ángel Romero.

Esta variación va a provocar la modificación del convenio que la entidad franjiverde tiene firmado, por tres años, con el Ayuntamiento, que es el propietario de ambos recintos deportivos.

El Elche va a realizar una importante inversión y va a cambiar todo el césped del Díez Iborra. La empresa Servi césped ya ha comenzado los trabajos, que están consistiendo en el levantamiento de toda la tierra y el sustrato que había en un campo que, en los últimos años, estaba dando muchos problemas y que no estaba en buenas condiciones, porque la modalidad de hierba que había plantada era grama Canaria, que genera unas raíces gordas que con el paso del tiempo dañan el terreno.

Se está creando un lecho con 40-50 centímetros de profundidad, que será rellenado con otro tipo de tierra y sustrato y la siembra de otra modalidad de césped, que será el mismo que hay plantado en el Martínez Valero para que los jugadores noten lo menos posible el cambio del lugar de entrenamiento al de los partidos.

El campo tardará más de un mes en estar en condiciones y, mientras tanto, la primera plantilla franjiverde, que la semana que viene regresará de la concentración de Pinatar Arena, deberá utilizar el polideportivo de Altabix y el estadio o buscar otro lugar de entrenamiento. Un nuevo imprevisto que va a generar la tardanza en finalizar la anterior temporada.

Con el ascenso a Primera, Altabix no reúne las exigencias mínimas para un equipo de la máxima categoría, porque se trata de un recinto abierto, en el que puede situarse gente a pie de campo y en el que hay poca seguridad e intimidad, más en estos momentos con la crisis sanitaria del coronavirus.

También se está estudiando la posibilidad de realizar una reforma integral en los vestuarios del Díez Iborra para que los futbolistas no tengan que trasladarse cada día de entrenamiento desde el Martínez Valero. Pero, de momento, no se contempla, aunque la entidad franjiverde sí que va a hacer alguna pequeña mejora para que estén más cómodos durante el trabajo.

Mejoras en Altabix

El Elche también se ha comprometido a realizar mejoras en el campo del polideportivo de Altabix porque, al trasladarse al Díez Iborra, los equipos que allí jugaban, como era el filial, el Femenino y los tres conjuntos de la ciudad que militan en Preferente (Unión Deportiva Ilicitana, Peña Arrabal y Torrellano) van a necesitar un terreno de juego para entrenar y poder disputar sus encuentros.

La entidad franjiverde, que es la encargada de mantener el campo del antiguo polideportivo Kelme, como figura dentro del convenio con el Ayuntamiento, tiene previsto cerrar el perímetro de la instalación deportiva con brezo sintético y poner una grada metálica para que pueda albergar encuentros con unas mínimas condiciones y sin estar todo el recinto abierto.

El campo del polideportivo Isabel Fernández de Torrellano también estará a disposición, tanto del Elche por la mañanas, en caso de alguna necesidad puntual, como para el resto de equipos, ya que se trata de una instalación municipal.

En total, con el cambio de césped del Díez Iborra y las mejoras de Altabix, la inversión que va a tener que acometer el Elche va a rondar los 150.000 euros. La intención del club ilicitano es, en el menor plazo posible, encontrar unos terrenos adecuados para poner en marcha la construcción de una ciudad deportiva propia, que acabe con todos estos problemas para entrenar, que están surgiendo, principalmente, desde que vendió los terrenos de los anexos al estadio Martínez Valero.