El entrenador del Elche Jorge Almirón se estrenó ayer en el banquillo del Martínez Valero con un afortunado empate ante el también recién ascendido Huesca y destacó la importancia del punto sumado y el amplio margen de mejora que tiene por delante su equipo. Para dar ese salto e calidad, el preparador argentino dio por hecho que llegarán otros cuatro o cinco jugadores antes de que mañana lunes se cierre el plazo de fichajes.

«Es importante sumar y es de destacar que el equipo se entregó y compitió, aunque en el primer tiempo no lo pasamos bien», reconoció Almirón. «En la segunda parte estuvimos mejor y encontramos más conexión cuando conseguimos algo de pausa, pero aún nos falta mucho por mejorar».

El técnico franjiverde explicó la suplencia de Pere Milla por «el desgaste» del partido del miércoles en Eibar y por la necesidad de «dosificar a sus jugadores», a los que elogió «por el gran esfuerzo que están realizando muchos de ellos, que son delanteros y están jugando de defensas, como Josan y Fidel, que no son carrileros; Sánchez Miño que viene sin entrenarse y Boyé, que sale de un confinamiento».

Almirón destacó el mérito de los cuatro puntos sumados por su equipo en los tres partidos disputados en la última semana «cuando aún estamos sin ensamblar como equipo y nos enfrentamos a otros ya armados como este Huesca, que fue dominador de Segunda y mantiene al mismo entrenador y un buen número de jugadores».

El técnico dará dos días de descanso a la plantilla y el martes está prevista su vuelta al trabajo.