El Elche no solo verá reducidos sus ingresos en los más de siete millones procedentes de la venta de abonos y las taquillas, como informábamos esta semana en este diario. El club ilicitano también tiene en serio riesgo la recaudación de más de 500.000 euros procedentes del patrocinio en vallas y paneles publicitarios de empresas de casas de apuestas.
La entrada en vigor del nuevo Real Decreto que regula la publicidad del juego y que prohibe toda relación comercial que tenga como objetivo establecer un patrocinio deportivo por parte de empresas vinculadas a las apuestas deportivas afectará a 13 equipos de Primera División y uno de ellos es el Elche.
El club ilicitano no cuenta esta temporada con patrocinadores de este tipo en su equipación. La pasada campaña sí que llevó en la manga de su camiseta la firma comercial «William Hill», por la que recaudó unos 70.000 euros. El contrato era por dos campañas, pero al conseguir el ascenso no se ha renovado. Además, tuvo a Recreativos Orenes, a través del juego «Vive la suerte», como uno de sus colaboradores. En el anterior ascenso de 2012 también contó con «Codere» como patrocinador y en la temporada 2012-2013, en su regreso a la máxima categoría, lució la publicidad de «Sportium» en la parte trasera de su camiseta, que fue muy vista, sobre todo en la polémica jugada del penalti de «La Roca» Sánchez a Pepe, en el partido frente al Real Madrid disputado en el estadio Martínez Valero.
Vallas y U televisiva
A pesar de desaparecer todo ese tipo de publicidades de la equipación, este año, la entidad franjiverde sí que cuenta con la casa de apuestas «bet365» como uno de sus principales patrocinadores, tanto en las vallas publicitarias fijas del estadio como en las vallas de luces Led de la U Televisiva que rodea el terreno de juego en cada uno de los partidos. Por ese concepto, el Elche ingresa más de 500.000 euros. Una cifra que solo se asemeja a la que aporta la inmobiliaria TM como principal patrocinador.
Además, el club ilicitano recibe un porcentaje de la publicidad de los patrocinadores de la U televisiva de Mediapro, que es la empresa que explota los derechos televisivos que LaLiga vende de forma generalizada y por los que los clubes obtienen grandes cantidades de dinero, que cubren la mayor parte de su presupuesto. Una de esas firmas comerciales es «Sportium», que tampoco podrá seguir patrocinando el deporte.
Hasta 13 equipos de Primera
El nuevo Real Decreto que regula la publicidad del juego afecta hasta 13 equipos de Primera División. Sevilla, Valencia, Betis, Granada, Levante, Alavés y Cádiz, que cuentan con patrocinadores de este tipo en sus camisetas. Y otros seis: Athletic Club de Bilbao, Getafe, Celta, Real Madrid, Elche y Osasuna cuentan con esponsors publicitarios en las vallas y paneles de sus estadios.
Además, 13 clubes de Segunda División: Zaragoza, Oviedo, Albacete, Las Palmas, Fuenlabrada, Ponferradina, Mirandés, Alcorcón, Sporting de Gijón, Rayo Vallecano, Málaga, Sabadell y Logroñés, también tienen firmados este tipo de patrocinios.
Según ha anunciado el presidente de LaLiga, Javier Tebas, la entrada en vigor de esta prohibición de las relaciones comerciales con empresas vinculadas con casas de apuestas puede castigar al fútbol con la reducción de más de 90 millones en sus ingresos.
La Patronal de Clubes mantuvo la semana pasada una reunión telemática con representantes de los equipos afectados y la intención es solicitar una moratoria de tres años para que se produzca un aplazamiento de la entrada en vigor de esta nueva normativa y que, de esta forma, se puedan cumplir los contratos que ya hay firmados sin la consiguiente merma de ingresos que produciría.
Sin embargo, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, que ha sido el principal valedor de este nuevo Real Decreto que regula la publicidad del juego, ha enviado una carta a todos los clubes implicados advirtiendo de que deben retirar el patrocinio de casas de apuestas al final de esta temporada. La guerra entre LaLiga, los clubes y el Gobierno está servido.
Bajos del Martínez Valero
Por otro lado, el pasado mes de mayo, las Cortes Valencianas aprobaron, con los votos a favor de los tres grupos del Gobierno del Botànic, PSPV, Compromís y UP, la nueva ley del juego y de prevención de la ludopatía en la Comunidad Valenciana, que impide, entre otras cosas, la apertura de casas de apuestas a menos de 850 metros de colegios e institutos y obliga a que entre establecimientos medie una distancia mínima de 500 metros. Se da la circunstancia de que el Elche tiene arrendado uno de los bajos del estadio Martínez Valero a una empresa de este tipo y existe un colegio, el King’s Infant School, que está situado a 550 metros, por lo que infringe también la normativa y, en caso de tener que cerrar, el club ilicitano también perderá el dinero que recibe del alquiler del local.
