La plantilla del Elche celebró este viernes el último entrenamiento de la semana y a su conclusión el técnico Jorge Almirón concedió dos días libres a sus futbolistas, que regresarán al trabajo el lunes, a partir de las diez de la mañana.

Los jugadores franjiverde disfrutarán un descanso antes de la guerra que les viene por delante, con los dos próximos partidos frente al Levante y el Cádiz, dos rivales directos en la lucha por la permanencia, y un mes de diciembre complicado con muchos partidos frente a rivales de la parte alta de la clasificación como Atlético de Madrid, Real Madrid y Villarreal, además del Granada y de Osasuna.

El objetivo del cuerpo técnico es que los futbolistas liberen la cabeza y desconecten del fútbol junto a sus familias después de unas últimas semanas intensas de trabajo.

A partir del próximo lunes también será el momento de ver en qué situación se encuentran los jugadores que arrastran molestias físicas y que han estado entrenando al margen del grupo a lo largo de esta semana.

Guido Carrillo, en principio, ya ha superado las molestias en la rodilla que le han impedido jugar los últimos tres partidos. Se ha unido a sus compañeros, aunque con preocupación.

Víctor Rodríguez también es uno más después del golpe en el muslo -«bocadillo»-, que no le permitió estar disponible frente al Celta, cuando empezaba a disfrutar de minutos.

Emi Rigoni, con los problemas en el hombro, y Fidel, con una microrrotura en la zona del soleo, son los que más difícil van a tener recuperarse a tiempo para el próximo encuentro del sábado 21 de noviembre, en el estadio Ciutat de València, frente al Levante. El argentino está descartado y el extremo izquierdo, si llega, será muy justo.

Edgar Badia va a depender de cómo se sienta cuando empiece a hacer portería y se tire al suelo. Mientras que Sánchez Miño y Lucas Boyé también arrastran distintas molestias musculares y han aprovechado esta semana que no hay competición para recuperarse. De no surgir ningún contratiempo, tanto el lateral izquierdo como el argentino estarán disponibles para jugar.

La enfermería se ha llenado aunque en la mayoría de los casos, salvo los de Fidel y Rigoni no son muy preocupantes.