Nino vivirá de una forma un tanto especial el encuentro que el Elche disputará el próximo sábado (14 horas), en el estadio Ciutat de València, frente al Levante.
Aunque no fue una de las mejores temporadas de su carrera, el goleador franjiverde tuvo en el conjunto granota la oportunidad, en la campaña 2006-2007, de cumplir uno de sueños como fue debutar en Primera División.
Después de ocho años intentando ascender a la máxima categoría en la entidad ilicitana, finalmente, viendo que no lo conseguía, optó por dejar el club de sus amores y marcharse al Levante, que pagó un millón y medio por su traspaso.
Nino solo estuvo una temporada en el cuadro granota, en el que disputó 19 partidos y marcó un gol. Viendo que no contaba con muchas oportunidades, la campaña siguiente fue vendido al Tenerife, con el que sí que logró el ascenso a Primera División y disfrutó de varios años en la máxima categoría teniendo continuidad y pudiendo demostrar sus cualidades.
Posteriormente, la leyenda franjiverde también jugó en la Liga de las Estrellas con el Levante y esta temporada, por fin, está cumpliendo su gran sueño de jugar en la máxima categoría con la camiseta del Elche, después del ascenso del pasado verano, que era otra de las espinas que tenía clavadas el capitán.
Profunda remodelación
El próximo sábado, 14 años después de su debut con Levante, regresará al estadio Ciutat de València, que verá muy cambiado porque en los últimos meses ha sufrido una profunda remodelación. El feudo granota, que fue inaugurado en 1969, ha sido sometido a un profundo lavado de cara de las gradas, que, ahora, cuentan todas con una cubierta, los vestuarios y las oficinas. El club granota está aprovechando su buena salud económica, después de varias temporadas seguidas en Primera División, para llevar a cabo una remodelación que necesitaba. Un espejo en el que también se mira el Elche para tratar de mejorar en los próximo años el Martínez Valero.
