La expedición del Elche CF se encuentra en el hotel NH Manzanares a la espera que llegue el momento de desplazarse hasta la Ciudad Deportiva de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) en Las Rozas para disputar, a partir de las diez de la noche, su partido de la Copa del Rey, frente al Rayo Vallecano.

Los diferentes cambios de horarios han provocado un auténtico caos en la programación. Los futbolistas franjiverdes ya no podrán regresar a tierras ilicitanas esta noche tras el partido, como tenían previsto, y tendrán que pernoctar en la capital de España. La programación del cuerpo técnico para preparar el importante partido de Liga del martes (19 horas) en Valladolid se ha ido al traste, aunque está prevista una sesión de trabajo este domingo, en el estadio Martínez Valero, nada más llegar.

El Elche han intentado retrasar el partido de Zorrilla, pero ha sido totalmente imposible porque los pucelanos juegan el viernes (21) en el Ciutat de València, frente al Levante. A pesar de que hay menos de 72 horas, entre el choque de esta noche y el del martes, la legislación ha cambiado y se pueden programar partidos cada 48 horas.

Pero no solo han sido esos los problemas que ha tenido la expedición franjiverde. En el hotel tenían preparado un picnic para los jugadores se lo comieran camino del aeropuerto después del partido programado a las cuatro de la tarde. Con el cambio de hora, se ha tenido que reprogramar todo y los futbolistas tenían que merendar a las seis de la tarde, pero en el establecimiento hotelero no tenían comida, ni cocinero, ni gente para ir a comprar. Además, tenían que volver a preparar las habitaciones, con el contratiempo que todo ello conlleva. Al final, se ha podido solucionar y los futbolista del conjunto ilicitano han podido coger fuerzas de cara al encuentro de esta noche y tienen sus habitaciones preparadas, donde han podido descansar durante la tarde.

El presidente del Elche, Joaquín Buitrago, el máximo accionista, Christian Bragarnik, y el director deportivo, Nico Rodríguez, han estado acompañando a la expedición en todo momento e intentando buscar soluciones. El vuelo de vuelta también se ha tenido que reprogramar y esperar que la empresa aérea encontrara avión y permiso para el despegue de mañana. Al final será a media mañana y los jugadores llegarán al mediodía. Nada más aterrizar se dirigirán al estadio Martínez Valero para realizar un entrenamiento de recuperación y posteriormente se marcharán a descansar con sus familias.

Los futbolistas franjiverdes solo dispondrán del entrenamiento del lunes para preparar el crucial partido frente al Valladolid. El lunes por la tarde viajarán a la capital Pucelana.

Joaquín Buitrago ha asegurado que "estamos molestos, pero no cabía otra opción que aceptar el cambio de horario porque no hay fechas libres para aplazar el encuentro". El Elche juega el martes 19 en Zorrilla y el domingo 24 frente al Barcelona en el Martínez Valero. Y el 26-27-28 de enero está programada la siguiente eliminatoria de la Copa.

"Ha habido una falta absoluta de previsión, porque el partido se podía haber jugado este mediodía en la Ciudad Deportiva de Las Rozas. Nos ofrecían otras soluciones estranboticas como acortar el campo de la Ciudad Deportiva del Rayo para no jugar en el área congelada o jugar el domingo, pero eso a nosotros nos destrozaba, porque el martes tenemos un partido importante de Liga en Valladolid, que es el que más nos interesa. El daño ya está hecho y por mucho que reclamemos no vamos a sacar nada, igual que nos paguen los gastos extras que estamos teniendo", ha señalado el presidente del Elche.