La Liga en Primera División ya ha cruzado su ecuador y conforme va avanzando la competición la clasificación se va clarificando cada vez más.

Si no se produce ninguna sorpresa a modo de desfallecimiento o de recuperación espectacular, algo poco improbable porque los equipos empiezan a asumir su rol, en la lucha por evitar el descenso, en la que está implicado el Elche, todo hace indicar que va a ser cuestión de siete equipos, que son los que ocupan la parte baja de la tabla en estos momentos.

Huesca, Valladolid, Eibar, Alavés, Osasuna y Cádiz apuntan a ser los rivales directos de los franjiverdes y de los siete saldrán los tres conjuntos que no puedan continuar la próxima temporada en la Liga de las Estrellas.

Además, como era previsible, esos siete clubes son los que han contado con un menor límite salarial para confeccionar sus plantillas. A excepción de Levante, que pese a contar con el segundo presupuesto más bajo se encuentra en una cómoda posición en la clasificación, con 27 puntos y con mucho de su camino hacia la salvación completado, el resto de los menor presupuesto son los que están abajo.

En la tabla clasificatoria, los dos últimos son Huesca (16 puntos) y Elche (18), dos recién ascendidos que, precisamente, han dispuesto del menor límite salarial, 37 millones los oscenses y 34,6 los ilicitanos, que tiene el más bajo.

El Valladolid, que es el otro equipo que está actualmente en las plazas de descenso (20 puntos), es el décimo tercero, con 49,3 millones y, sin embargo, ocupa la antepenúltima posición en la tabla.

La lucha por salvar la categoría está muy igualada y entre el equipo de Pacheta, que es el colista, y el Cádiz, que ocupa la décimo cuarta posición, hay seis puntos de diferencia, es decir dos partidos, con 18 todavía por disputar.

Getafe y Valencia también suman 24, al igual que los gaditanos, pero cuentan con buen potencial en sus plantillas y parece poco probable que puedan estar al final de la competición en la zona roja. Aunque no pueden descuidarse porque en numerosas temporadas se ha visto como conjuntos que tenían aspiraciones más altas han terminado condenados al pozo del descenso. El último ejemplo fue el Espanyol, que la campaña anterior bajó a Segunda División después de 26 años en Primera.

El Cádiz está aprovechando el colchón de puntos que consiguió al principio de Liga en los que protagonizó varias sorpresas, venciendo al Real Madrid y al Barcelona. Pero, poco a poco, el cuadro de Álvaro Cervera ha ido perdiendo posiciones y se ha ido situado en su hábitat natural. Actualmente está solo tres puestos por encima del descenso, con cuatro puntos de ventaja. Los gaditanos, con el cuarto límite salarial más bajo y como recién ascendido, eran conscientes de que iban a sufrir para salvar la categoría.

Justo detrás de los andaluces se encuentra Osasuna (22 puntos), que ha estado la mayor parte de la temporada en la zona roja, pero con su triunfo el pasado domingo contra el Eibar (2-1) ha salido del descenso y respira un poco, aunque está a solo dos puntos de volver a caer. Los navarros están en un puesto similar al que le correspondería por su límite salarial.

Algo parecido le ocurre al Alavés  (22). Los vitorianos, décimo sexto presupuesto y décimo sexto en la tabla, también llevan toda la Liga coqueteando con el infierno. El club vitoriano destituyó a Pablo Machín y han buscado la reacción con Abelardo. El técnico asturiano estrenó su casillero de victorias la jornada anterior con un triunfo vital por la mínima (1-0) ante el Valladolid. Ahora tiene un pequeño margen de dos puntos.

El Eibar es el primer equipo que está fuera de las posiciones fatídicas y lo está solo por el mejor gol-average general entre goles a favor y en contra con el Valladolid, que también ha permanecido la mayoría del campeonato en la zona baja de la tabla. El equipo vasco tiene el décimo quinto límite salarial y en la clasificación es décimo séptimo.

El Elche, que es penúltimo, con 18 puntos; y el Huesca, último, con 16; sabían que estaban condenados a sufrir por su condición de recién ascendidos y por contar con la menor cantidad de dinero para su plantilla. Pero a pesar de su posición clasificatoria, son conscientes de que tienen cinco equipos por delante al alcance de su mano y que mejorando sus prestaciones van a contar con posibilidades de salvarse. Los oscenses se agarran al clavo ardiendo del efecto Pacheta y los de Almirón a las buenas sensaciones que dejaron en la segunda parte del partido del pasado sábado frente al Villarreal.

El dinero marca la parte alta

Si en la lucha por evitar el descenso se encuentran los equipos con los límites salariales más bajos, el dinero también está marcando la parte alta de la clasificación. Excepto el Atlético de Madrid, que es el tercero en presupuesto y es líder, los otros conjuntos que ocupan las cinco primeras posiciones: Real Madrid, Barcelona, Sevilla y Villarreal son los que han dispuesto de cantidades más altas para poder configurar sus plantillas. De los demás, salvo el Valencia, también están en un puesto similar al que ocupan en la lista de los límites salariales.