La futbolistas del Elche no tendrán esta semana descanso porque tiene dos partidos: el miércoles (19 horas), el encuentro aplazado de la primera jornada, en el Camp Nou, frente al FC Barcelona; y el domingo (18.30 horas), en el estadio de Los Cármenes frente al Granada.

La plantilla franjiverde volvió ayer a entrenar y lo hizo con una sonrisa en el rostro después de la importante victoria del pasado sábado frente Eibar. Los jugadores del conjunto ilicitano no dudan en destacar la mejoría que ha experimentado el equipo con la llegada de Fran Escribá al banquillo y vuelven a creer en la permanencia.

El central y capitán Gonzalo Verdú señalo que «sabíamos desde hace tiempo que una victoria nos haría verlo todo diferente. Ganamos a un rival directo, al que también le hemos superado en el golaveraje particular y los hemos metido abajo en la clasificación».

El defensa cartagenero iba más allá y quiso que recordar que el Elche está aquí: «Mandamos un mensaje al resto de equipos. No estamos muertos y vamos a luchar hasta el final. Esta victoria tiene muchos puntos positivos. Tenemos que disfrutarla, pero pensar ya en el siguiente partido que viene enseguida».

Además, Verdú destacó la capacidad de sufrimiento que mostró el conjunto ilicitano para mantener la ventaja de un gol durante muchos minutos. «Ganar así te da mucho más que ganar en un partido mucho más vistoso. Fue un encuentro de brega y lucha. El Eibar es uno de los mejores equipos en cuanto a físico y la manera de ganar dice mucho, nos va a dar la vida. Partiendo de esa base, vamos a ganar mucho».

Dani Calvo ha visto como su situación ha cambiado de forma radical con la llegada de Escri ba. Ha pasado de ser el cuarto central con Almirón a a titular y, encima, marcando el gol de la victoria.

«El nuevo entrenador nos ha cambiado la dinámica. Llevábamos muchos partidos sin ganar y las sensaciones no eran buenas. Nos ha conectado a todos los jugadores», señaló el futbolista oscense, a la vez que aseguró que el triunfo ante el Eibar «sube la autoestima del grupo y lo refuerza». El defensa del Elche confía en que sea «un punto de inflexión».

En términos similares también se pronunció Tete Morente, otro futbolistas que subió de forma considerable su nivel en el choque del pasado sábado. «No estamos muertos y vamos a luchar hasta el final. Con la llegada del nuevo técnico ha cambiado la perspectiva y se ven las cosas de forma diferente», y también considera que «el grupo va a crecer a partir de este triunfo. Esta victoria nos va a dar mucho para lo que viene, que es muy importante para seguir en Primera. El equipo da la cara siempre», comentó el gaditano.

La jornada de este fin de semana ha sido muy positiva para el Elche, aunque lo fundamental es la victoria ante el Eibar, un rival directo. El conjunto franjiverde no ha salido del descenso, pero ya está en puntos de permanencia. Hay un triple empate a 21 con Valladolid y Eibar y como todavía nos se han disputado todos los enfrentamientos entre ellos, no se tiene en cuenta el golaveraje particular.

La diferencia general entre goles a favor y en contra es la que marca la clasificación. Los pucelanos, tras perder con el Real Madrid (0-1), tienen -13, los ilicitanos -11 y los vascos -8. Por ello, el Valladolid es ahora penúltimo, el Elche antepenúltimo y el Eibar está, momentáneamente, fuera del descenso, aunque sabe que en caso de empate a puntos con el Elche a final de temporada, los franjiverdes les superarían en la tabla.

El conjunto de Escribá también se ha situado a un solo punto del Alavés, que es quinto por la cola, con 22 puntos; mientras que tiene a tiro de un partido al Getafe, que suma 24. El Cádiz, con su empate en el Camp Nou frente al Barcelona, se ha situado con 25.

El Huesca de Pacheta sigue con vida y sumó un triunfo vital frente al Granada (3-2), que le permite no hundirse en la clasificación. Los oscenses suman 19 puntos y se han situado a dos de los puestos de permanencia.

Los próximos rivales pinchan

La noticia negativa para el Elche es que sus dos próximos rivales sufrieron ayer sendos pinchazos y no podrán recibir a los franjiverdes con la «relajación» que podrían haber tenido en caso de haber logrado la victoria. El Barcelona, tras su empate con el Cádiz, saldrá a por todas el miércoles porque solo le vale el triunfo para seguir con opciones de luchar por el título de Liga. Mientras que el Granada, después de caer con el colista Huesca y aunque está más pensando en la competición europea frente al Nápoles, también recibirá a los ilicitanos el domingo con más exigencia y con más motivación que si no hubiese perdido.