Dani Calvo terminó bastante enojado el partido frente a Osasuna (2-0) y reconoció que las sensaciones habían sido "muy malas". "Queríamos conseguir la victoria o, al menos puntuar. Acabamos fastidiados porque le dejamos bastante libertad a los jugadores de Osasuna y eso nos llevó a la derrota. Empezamos bien, con centros laterales que no conseguimos rematar. Osasuna juega bien por las bandas y por ahí llegaron los dos goles".

El central franjiverde quiere pasar página a la derrota de El Sadar porque "el miércoles tenemos un partido muy importante frente al Valladolid", y quiere levantar el ánimo de la afición, que estaba muy pesimista después del encuentro en Pamplona. "No hay que ser pesimista, sabíamos que íbamos a sufrir hasta el final. Ahora hay que corregir los detalles que hicimos mal frente a Osasuna y afrontar el partido Valladolid, que va a ser crucial. Es un rival directo, que está en nuestra misma situación, con solo un punto más. En los partidos de casa estamos en una buena dinámica y vamos afrontar el encuentro como una final".