El éxito del Elche sobre el césped, con la consecución de la permanencia en Primera División no ha sido el único «subidón» a celebrar por la entidad ilicitana este curso. Con la finalización del campeonato se abre un nuevo periodo de mercado al que el club franjiverde va en una situación muy distinta a la de hace un año, por diversos motivos.
En primer lugar porque la temporada en la elite, pese a la pandemia, ha traído un rotundo aumento en los ingresos en comparación a los periodos anteriores en Segunda o Segunda B. Por lo tanto, el Elche tendrá más dinero para gastar, si así lo considera oportuno su gestor principal, Christian Bragarnik. Y en segundo lugar por la revalorización de la plantilla ilicitana, con unos jugadores que han visto aumentar considerablemente su caché en el mercado.
Tanto es así que, con respecto al inicio de la 2020/21, la plantilla del Elche es la que más se ha revalorizado de todas las de Primera División. Con el mercado cerrado (5 de octubre), el valor de la plantilla franjiverde era de 34,9 millones de euros, según datos de Transfermarkt. En su última revisión de junio, este ha subido hasta los 41,2 millones. Es decir, un 18,1% más. Por detrás quedarían Real Sociedad (14,8%), Huesca (13,8%) u Osasuna (12,8%).
La diferencia es aún mayor, casi abrumadora, si la referencia a tomar es la plantilla que empezó la Liga en septiembre. Hay que recordar que, para entonces, al Elche le quedaban bastantes fichajes por acometer. Su valor era de 20,5 millones, un 101% menos que ahora. Durante el campeonato, el Elche ha doblado su valoración en el mercado. Por último, con respecto al valor del equipo que logró el ascenso en agosto (11,1 millones) la subida ha sido de un 271,2%. Los otros dos ascendidos presentan unas cifras mucho más bajas: Huesca (145, 5%) y Cádiz (33,1%).
¿Movimientos de mercado?
Este crecimiento en el mercado futbolístico es uno de los objetivos de Bragarnik y el equipo de trabajo que gestiona el club, conocedores del funcionamiento de este sector. Lo han demostrado, sin ir más lejos, con el primer movimiento de este verano, la venta de Rigoni al Sao Paulo tras ejecutar una casi ínfima opción de compra en febrero al Zenit de San Petersburgo. La jugada debería dejar una notable ganancia por un futbolista que, curiosamente, ha sido una de las decepciones de la reciente temporada.
En el otro bando se encontraría, por ejemplo, Raúl Guti. Hace algo menos de un año, el Elche hacía la inversión más alta de su historia por el mediocentro, pagando algo más de 5 millones de euros al Real Zaragoza por su traspaso. Ahora, su valor es casi del doble. El Centro Internacional de Estudios Deportivos (CIES) lo tasa en 10 millones, cifra en la que coincide BeSoccer Pro, que únicamente reduce en unos cien mil euros la tasación (9,9 millones). A Guti no le faltarán pretendientes. Villarreal y Betis han seguido de cerca su evolución.
Otro jugador que ha aumentado mucho su cotización es el delantero argentino Lucas Boyé, por el que el Elche también ejerció su opción de compra al Torino antes de terminar la Liga. Los franjiverdes pagaron en torno a los 2 millones de euros y ahora su valor es de entre 5 y 7 millones. Marcone (4,5 millones), Tete Morente (4,5), Fidel (4), Edgar Badia (4) y Pere Milla (3) también tienen muy buen mercado según diferentes herramientas de análisis que usan las direcciones deportivas de los principales clubes, tanto europeos como sudamericanos.
De hecho, algunas de ellas como el ya mencionado CIES arriesgan más en sus valoraciones y se atreven a hacer una proyección respecto al nivel más alto que podrían alcanzar los jugadores en sus carreras. Ahí, por ejemplo, otorgan un valor de 15 millones de euros al lateral colombiano Helibelton Palacios, de 10 millones a Morente o de 7 al central zurdo Josema. Unas cifras que, evidentemente, parecen lejos de la realidad actual de los tres jugadores del conjunto ilicitano.
Visto esto, no sería de extrañar que el club se mueva durante este verano en la dirección de encontrar algún club que permita obtener un beneficio económico por alguno de los jugadores que este año han ofrecido un buen rendimiento. Rigoni ha sido el primero, pero es muy probable que no sea el único.
La revalorización de jugadores es uno de los activos del Elche para crecer y estabilizarse en Primera División: comprar barato, proyectar futbolistas y vender caro para sacar el máximo beneficio posible. Una máxima sencilla de exponer, pero complicada de ejecutar. El Elche, este curso, parece que lo ha logrado.
Vuelta al trabajo: el 5 de julio, fecha de regreso marcada
La plantilla del Elche sigue disfrutando de sus merecidas vacaciones tras una temporada exigente en lo físico e inusual en las fechas, debido a las consecuencias del parón que hubo entre marzo y junio de 2020 por la pandemia.
De cara al regreso al trabajo para las pruebas médicas y el inicio de la pretemporada, el club tiene marcada la fecha del 5 de julio. Por lo tanto, los jugadores disfrutarán de 43 días de vacaciones, tras irse a descansar el día siguiente al último partido de Liga disputado contra el Athletic.
La situación será radicalmente opuesta a la del curso recientemente finalizado, ya que el conjunto ilicitano terminó la temporada del ascenso en Girona el 23 de agosto y volvió al trabajo el 8 de septiembre, por lo que apenas hubo 16 días de parón entre una fecha y la otra. Esta semana deberá quedar fijado todo el calendario de preparación para la competición, desde el lugar del «stage» para realizar los entrenamientos hasta los partidos amistosos, con el posible regreso del Festa d’Elx como principal atractivo del verano.
