Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El Elche crece con «la defensa Escribá»

El equipo franjiverde solo ha recibido dos goles en cuatro partidos, fundamentando sus cinco puntos en el orden y la fortaleza atrás - Kiko Casilla ha mantenido dos veces su portería a cero y solo le han rematado 13 veces entre los tres palos

Fran Escribá da instrucciones a sus jugadores durante un entrenamiento reciente. | ANTONIO AMORÓS

El objetivo principal del ajedrez es dar mate al rey adversario. Sin embargo, ese no es el primer objetivo. En el fútbol, el fin último es, sin duda, ganar el partido marcando más goles que el rival, pero tampoco es el primer propósito. Sobre esta tesis se fundamenta «la defensa Escribá» que, como el gambito de dama, la apertura escocesa o las defensas siciliana o francesa, se basa en el sacrificio del conjunto para conseguir el bien común, la victoria.

El entrenador del Elche está consiguiendo poner en práctica su filosofía de juego, basada en la fortaleza en defensa para, a partir de ahí, crecer. Los primeros resultados así lo corroboran. Cinco puntos y décimos. Además, en cuatro partidos de LaLiga Santander, el conjunto ilicitano solo ha recibido dos goles, manteniendo su portería a cero en dos ocasiones y fundamentando su crecimiento en la primera línea de juego.

El Elche crece desde la defensa y, salvo ante el Sevilla, los otros tres rivales (Athletic de Bilbao, Atlético de Madrid y Getafe) han sido incapaces de generar demasiadas ocasiones de gol -solo 13 balones entre los tres palos-. Los vascos remataron solo tres veces a portería, cuatro los colchoneros, 5 los sevillanos y una los de Míchel. También es cierto que los franjiverdes tampoco han llegado fácil arriba. De hecho, solo ha conseguido dos goles a favor en los cuatro partidos y ha rematado a puerta solo en 11 ocasiones, dos en cada uno de los dos primeros choques, cuatro ante los de Lopetegui y tres ante el Getafe. Pero el resultado final se traduce en cifras que permiten al Elche soñar, al menos, con no sufrir como la pasada campaña.

La llegada de Fran Escribá tras los malos resultados del proyecto Almirón, en febrero de este año, sirvió para ofrecer al equipo un orden y un equilibrio que en el nuevo curso se han reforzado. No solo con mayor experiencia y ensayo, sino también con jugadores que han venido a incrementar la competitividad en la plantilla y a empaparse de la filosofía de juego que el míster transmite. El futbolista que llega al Elche tiene que estudiar «la defensa Escribá», una apertura de partido que se basa en ser muy fuertes en defensa para que el conjunto coja la confianza suficiente para lograr un resultado positivo.

Salvo la derrota por un accidental fallo de Kiko Casilla ante el vigente campeón liguero, el Elche ha logrado hasta el momento dos importantes empates, ante dos huesos de Primera como son Athletic y Sevilla, y una victoria, la del pasado lunes ante el Getafe. En este último partido es donde mejor se pudo ver en qué consiste esta apertura ajedrecista del técnico valenciano. El equipo franjiverde ahogó a los madrileños, que se vieron incapaces durante casi todo el partido de generar ocasiones. De hecho, solo tuvieron una, el remate de un córner al final del encuentro, que tuvo una gran respuesta del veterano guardameta. Kiko Casilla sacó una mano providencial para salvar dos puntos , sumar dos partidos con la portería a cero. En general, tuvo muy poco trabajo. Tampoco lo ha tenido en el resto de envites.

Esquema táctico

En el último encuentro también se pudo ver que Escribá cuenta con más opciones y recursos llegados este verano. Además, el fondo de armario que sale desde el banquillo es de otro nivel. El entrenador ha apostado principalmente por jugar con cinco defensores -tres centrales y dos carrileros-, tres centrocampistas y dos delanteros. Solo en el partido ante el Sevilla, el técnico utilizó el 4-4-2 durante el segundo tiempo.

Uno de los nuevos recursos, el delantero Lucas Pérez, marcó el gol ante el Getafe. Y otro que se dejó notar fue el trabajo de Omar Mascarell en el centro del campo, liberando en gran medida a Raúl Guti, que hacía tiempo que no se sentía tan acompañado.

Llegados a este punto cabe recordar unas de las primeras ruedas de Prensa de Escribá como técnico del Elche, pronunciadas antes de su primer choque ante el Eibar. Su idea fue clave en la salvación de la pasada temporada y también debería serlo para que este año se pueda lograr el objetivo de una forma más holgada. «Espero que se noten cosas. Hemos tratado de dotar al equipo de orden y equilibrio». Dos atributos fundamentales para conseguir el jaque mate o las tablas. Ambos suman.

Boyé no entrena con el grupo y el Levante ya cuenta con Rober Pier


El delantero argentino del Elche Lucas Boyé no se ejercitó ayer con sus compañeros en el estadio Martínez Valero por unos problemas físicos y tiene muy complicado participar ante el Levante, como ya anunció ayer este diario, al continuar co nsus molestias en un aductor, que ya le impidieron rendir a buen nivel en los partidos ante Sevilla y Getafe. En el Elche tampoco estará el central Pedro Bigas -dos meses de baja-. Por contra, el Levante recupera a su defensa Rober Pier, que ya se entrena con normalidad tras superar una leve sobrecarga muscular, según informaron fuentes del club valenciano, y el entrenador Paco López dispone ya de los cinco centrales de la primera plantilla. Con la presencia de Pier y después de que Sergio Postigo ya jugara unos minutos la semana pasada después de superar un esguince de rodilla, los valencianos tendrán que descartar a dos centrales para hacer el once inicial. Vezo y Duarte completan la nómina de centrales a la que se sumó, con el mercado cerrado, el alemán Shkodran Mustafi, que durante su presentación celebrada el pasado miércoles admitió que está «casi listo» para debutar.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats