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Bragarnik tensa la cuerda por Olaza

El propietario del Elche no está dispuesto a pagar los dos millones que el Valladolid pretende incluir en la opción de compra obligatoria y los pucelanos no quieren perder la inversión realizada la pasada temporada

Lucas Olaza, junto a Raúl Guti, durante el Elche-Valladolid de la pasada temporada. | LALIGA

El desenlace del fichaje de Lucas Olaza por el Elche va camino de convertirse en un culebrón del que, posiblemente, no se conozca el final hasta última hora antes de que el lunes se cierre el mercado.

El propietario del club ilicitano, Christian Bragarnik, no está dispuesto a pagar los dos millones de euros que el Valladolid pretende incluir en la cláusula de compra obligatoria que acompañe a la cesión.

Por su parte, la entidad pucelana no quiere perder la inversión realizada en el mes de enero de la pasada temporada, cuando lo fichó del Celta y tuvo que abonar 300.000 euros en concepto de cesión y asumir la opción de compra a Boca Juniors, al que pertenecían sus derechos. La cantidad inicial eran cuatro millones, pero, finalmente, se quedó en dos por el descenso de los vallisoletanos a Segunda. El pago fue fijado en dos plazos: uno al final de la pasada campaña y otro que cumple a la conclusión del presente curso.

En la entidad franjiverde gusta mucho el futbolista internacional uruguayo. A sus 27 años, consideran que todavía tiene mucho recorrido y que puede ser un buen complemento para Mojica en el lateral izquierdo. A favor del Elche juega el hecho de que Olaza quiere venir para volver a jugar en Primera División, después de haberlo hecho la pasada temporada en el Celta. En Valladolid comenzó como titular con Pacheta, pero no se ha adaptado y no ha encontrado la motivación necesaria en la categoría de plata del fútbol español. Ha disputado solo once partidos de Liga y tres de Copa y Nacho Martínez le ha quitado el puesto.

El club pucelano, con el que tiene contrato hasta 2025, está dispuesto a facilitarle la salida, toda vez que cuenta también con Raúl Carnero para la posición de lateral izquierdo. La entidad que preside Ronaldo Nazario, que cuenta con el oriolano Fran Sánchez como director deportivo, se ahorraría una de las fichas más altas de su plantilla.

El conjunto castellano ha propuesto tres opciones: una cesión pura y dura, en la que el Elche asumiría su ficha y pagaría una prima por objetivos. De esa forma recuperaría parte del dinero invertido y la próxima campaña, en caso de ascenso a Primera División -ocupa la segunda posición en Segunda- recuperaría a un futbolista que consideran válido para la máxima categoría. Una cesión con cláusula obligatoria de compra de dos millones si los franjiverde logran la permanencia. O una tercera posibilidad, que sería una venta directa, también por unos dos millones.

La pelota está ahora encima de la mesa de Bragarnik, que no quiere realizar una inversión de ese tipo sin saber el rendimiento que puede dar Lucas Olaza en el Elche.

Las tres partes están condenadas a entenderse, porque el Elche desea al jugador, el internacional uruguayo quiere volver a jugar en el escaparate y abrirse de nuevo las puertas de su selección y la posibilidad de disputar el próximo mundial. Y el Valladolid liberaría una importante masa salarial para seguir reforzando la plantilla de Pacheta. Quedan cinco días para acabar el plazo de fichajes y veremos quien se lleva el gato al agua. En el Martínez Valero manejan otras alternativas para el lateral izquierdo, por si no llega a buen puerto. Pero el deseado es Olaza.

Capa, John y Knezevic

Reforzar la posición de lateral izquierdo es prioritaria para el Elche. El club ilicitano tiene dos fichas libres tras la salida de Benedetto y Josema. Para el lateral derecho había surgido la posibilidad de Capa, pero en el Martínez Valero la dan prácticamente por descartada.

Por otro lado, antes del lunes, Bragarnik también debe decidir el futuro de John y de Knezevic. El canterano, sobre todo tras su buena actuación ante el Madrid, tiene todas las papeletas para quedarse, toda vez que en el filial no hay un central de garantías que, en caso de emergencia, pueda ayudar al primer equipo. Incluso, Sergio Bono ha planteado dejar el Ilicitano.

Por su parte, el joven jugador serbio apunta a salir cedido a otro país, toda vez que Extranjería, después de cinco meses de gestiones, no le aporta el permiso de residencia necesario para poder legalizar su ficha y poder jugar con el Elche.

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