El Girona Fútbol Club, el último equipo en ascender estar temporada a Primera División, será un rival inédito para Elche C.F. Ambos equipos nunca se han enfrentado en la máxima categoría del fútbol español, por lo que los enfrentamientos de la temporada 2022-23, según recoge EFE, serán los primeros entre ambos equipos en esta competición.

El conjunto ilicitano, que por tercera temporada consecutiva militará en Primera División, sí tiene precedentes ante los otros 18 rivales, incluidos los otros dos recién ascendidos, Valladolid y Almería. La anterior y única etapa del Girona en Primera, durante las temporadas 2017-2018 y 2018-2019, coincidió con el Elche en Segunda B y Segunda, respectivamente, por lo que no pudieron enfrentarse en la élite. Los catalanes subieron por primera vez en su historia a Primera División en la campaña 2016-2017, la misma que el club ilicitano cayó al pozo de Segunda B. Los gerundenses estuvieron dos cursos en la máxima categoría y no coincidieron con los franjiverdes.

La conexión entre ambos equipos, sin embargo, es intensa en los últimos tiempos, ya que el Girona fue el rival al que el Elche derrotó en la final del ascenso (0-0 y 0-1) de hace tres temporadas.

Además, en la plantilla del Elche hay fuertes vínculos con el Girona, ya que su entrenador, Francisco Rodríguez, dirigió al conjunto catalán durante dos temporadas, y los jugadores Gerard Gumbau y Johan Mojica, piezas claves del equipo ilicitano, llegaron al club desde Montilivi.

Un rival con dinero

A pesar de ser un recién ascendido, el Girona Fútbol Club cuenta con un importante respaldo económico. Su propietario es la empresa “City Football Group”, la misma que la del Manchester City de la Premier de Inglaterra. Su máximo accionista es Ignacio Más-Bagá, quien cuenta con el 46% de los títulos, mientras el empresario boliviano Marcelo Claure ostenta el 35% y Pere Guardiola, hermano del entrenador del City y, a su vez, representante de futbolistas, el 16%.

La masa social del conjunto catalán no es muy amplia, pero tras el ascenso, sus dueños van a realizar una importante inversión, por lo que dispondrá de dinero para configurar una plantilla competitiva que pueda lograr la permanencia, que es el mismo objetivo del Elche. En septiembre de 2021, a comienzos de la temporada pasada, los propietarios asumieron las deudas de más de diez millones de euros, las capitalizaron y completaron una ampliación de capital por 20 millones de euros, que le permitió formar un equipo para luchar por el ascenso, que, al final, han conseguido.

Además, su relación con el Manchester City le permite que puedan contar con jóvenes jugadores cedidos, como ya ocurrió en su anterior etapa en Primera División. Por lo tanto, los gerundenses serán un rival peligroso para el conjunto ilicitano.