Machín: «Nos estamos acostumbrando a que arbitre el VAR»

Tocado tras una nueva derrota en un partido decidido prácticamente en un abrir y cerrar de ojos, Pablo Machín, técnico del Elche, confesó estar peor que tras encuentros anteriores, aunque recalcó, una vez más, el esfuerzo de los suyos, la mala suerte que se está cebando con el Elche y la necesidad de ser positivos a partir de este mismo domingo para intentar revertir la pésima situación franjiverde a la conclusión de la primera vuelta.

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Sobre la acción polémica en la expulsión de Pedro Bigas, que inicialmente el colegiado principal había sancionado con cartulina amarilla, Machín se mostró bastante contundente. «Vamos a pensar que es mala suerte», lamentó el técnico franjiverde. «La sensación es mejor la del árbitro en directo, pero nos estamos acostumbrando a que arbitra más el VAR que el que está en el campo», agregó. Además, el soriano también se quejó de la mala suerte por el mal bote del balón que le hace a Pedro Bigas hacer un control defectuoso y perder la posesión de la pelota en dicha acción decisiva.

«Es difícil tras perder 3-0, pero bastantes cosas negativas tenemos como para ahondar en ellas», respondió Machín al ser cuestionado sobre la dinámica negativa de los suyos. «El equipo ha levantado la cabeza después de esos cinco minutos en los que hemos encajado dos goles. No podemos frustrarnos por esa decisión (la roja a Bigas) y regalar dos situaciones de gol», prosiguió, antes de volver a elogiar el segundo tiempo de su equipo en una situación tan contraria: «Hemos vuelto a demostrar que lo dejamos todo en el terreno de juego. Es muy difícil estar con diez ante un rival como el Sevilla. El partido podría haber finalizado en la primera parte».

Machín incidió en el trabajo psicológico que va a volver a ser necesario realizar a partir de hoy mismo para recuperar el ánimo del vestuario, muy tocado tras la derrota en Sevilla y escenificado en futbolistas como Pere Milla o Lucas Boyé.

«No van a estar dando saltos de alegría. Nos tenemos que reponer y pensar en el siguiente rival. No nos tenemos que fijar en objetivos a largo plazo. Nuestra Liga es competir cada partido. Tenemos que hacer durante más minutos los buenos minutos que hemos hecho en anteriores partidos. A partir de mañana estaré con las pilas a tope para levantar el ánimo de los jugadores. Creo que están trabajando bien en el día a día y el fútbol no puede ser siempre tan cruel», finalizó Machín, que recalcó la necesidad de que lleguen varios refuerzos antes de cerrarse el mercado invernal.

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Por su parte, Boyé fue bastanre claro al resumir la situación del Elche a la conclusión del partido. «Una derrota más que nos sigue hundiendo. Cuando las cosas están mal todo cuesta el doble. No queda otra que seguir poniendo el pecho cada fin de semana», resumió el argentino, que pasó un día más sin ver puerta.