La historia deja una de cal y otra de arena al líder Elche

¿Cuántas veces ha llegado el Elche a la antepenúltima jornada en Segunda División como líder y luego ha ascendido? Pese a que, con 41 temporadas en la categoría de plata, el club franjiverde es uno de los clásicos del segundo escalón del fútbol español, lo cierto es que únicamente en tres ocasiones ha afrontado los tres últimos partidos de un curso desde lo más alto de la tabla, dos como líder y una como colíder.

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Dejando al margen el ascenso de la 2012-2013, campaña en la que de la mano de Fran Escribá el Elche ocupó la primera plaza durante las 42 jornadas y precisamente en la 39 certificó matemáticamente el salto a Primera División, sin necesidad de jugar su partido, las otras dos veces dejan una de cal y otra de arena en la centenaria historia de la entidad ilicitana.

El primer ascenso a Primera

En 1959, un Elche que con César Rodríguez, histórico del fútbol español y del Barcelona, como entrenador-jugador era un recién ascendido en la categoría, ocupaba la primera posición en la jornada 27, en una liga de 16 equipos y, por lo tanto, 30 partidos. Los franjiverdes tenían 36 puntos (las victorias contabilizan dos puntos y no tres) y, curiosamente, el segundo clasificado, como ocurre ahora, era el Levante, con 34. Tercero era el Almería, con 30.

Aquella temporada solo subía el campeón de Segunda de manera directa, ya que el segundo debía disputar una promoción. Por lo tanto, los pupilos de César debian defender esa posición de honor si querían militar, por primera vez en la historia del Elche, en la élite del balompié nacional. Lo consiguieron, al finalizar el campeonato con 40 puntos, por los 37 de los valencianos.

En la jornada 28, aquel Elche sufrió una derrota (2-0) en el campo del Plus Ultra, filial del Real Madrid, con dos tantos en la primera mitad de Szabo y Casado que obligaron a ceder el liderato ante la igualdad de puntos al Levante. Sin embargo, la semana siguiente cambiarían las tornas, con una victoria ilicitana en casa ante el Murcia (2-1, Cardona y Villarrubia como goleadores locales) y el pinchazo de los granotas en Málaga.

Por lo tanto, al Elche le valía con empatar en Tenerife en la última jornada para asegurar el ascenso. Tras un viaje un tanto accidentado, en el que se perdieron las maletas con las equipaciones, los ilicitanos pasaron el rodillo, imponiéndose por 0-3 merced a los tantos de Nito, Cardona y Pauet, certificando el ascenso a Primera División por primera vez en la historia de la entidad.

El día del Cádiz

Si el desenlace de esta temporada 2024-2025 apunta a ser de infarto habría que inventar una descripción para el de 1981. En la jornada 35 (liga de 20 equipos y 38 partidos) el Elche no era líder, pero compartía puntuación (41) con Rayo Vallecano, Castellón y Racing de Santander, ubicado en la tercera posición. Por detrás estaban Sabadell y Málaga con 40 y Cádiz con 39. Es decir, siete equipos en un pañuelo.

Aquel desenlace terminó siendo cruel para el Elche. Antes, en la jornada 36, el conjunto dirigido por Evaristo Carrió ganó al Alavés en el Martínez Valero, remontando en dos ocasiones los goles de Señor (sí, el del 12-1 del España-Malta) con otro doblete de Chomín y un penalti transformado por Kostic en el minuto 83. "Un milagro", tituló la crónica de INFORMACIÓN de aquel duelo, lo que habla del vaivén de emociones vividas en ese partido.

Los franjiverdes también cumplieron en la jornada 37 ganando en Málaga por 0-2, con actuación estelar de Félix Palomares, que salió tras el descanso para anotar las dos dianas en la segunda parte. El Elche era líder, empatado a puntos con el Castellón y con dos de renta sobre Rayo, Cádiz y Racing. Subían tres escuadras y los gaditanos visitaban un Martínez Valero que abrió las puertas a más de 70.000 espectadores.

El drama se empezó a mascar con el gol de Zúñiga para los visitantes en el primer tiempo, igualado por Chomín a la hora de partido. El empate le valía al Elche, pero en el minuto 79 llegó el mazazo: Mejías, que en la 1992-1993 disputaría su última temporada como profesional en la ciudad de las palmeras junto a su hermano, marcaba el 1-2. Entre tímidos ataques en lugar de un acoso y derribo y el sonido de los transistores la afición franjiverde, en masa, comprobó como se producía un quíntuple empate entre Castellón, Cádiz, Racing, Elche y Rayo que dejaba a su equipo cuarto, sin ascenso.

Cosas del destino, el otro gol que, aparte del de Mejías, apartó al Elche de las tres primeras posiciones del campeonato en aquel final de infarto lo marcó Quique Setién, mentor del actual entrenador franjiverde, Eder Sarabia; para dar la victoria (y el ascenso) al Racing contra el Levante, culminando un drama, el del "día del Cádiz", que varias generaciones de franjiverdes todavía recuerdan. Y al que esperan no tener que mentar en el presente.