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a falta de personal cualificado ha pasado de ser un problema puntual a generar ya una alarma en el sector del calzado. La preocupación la tiene la propia Federación de Industrias del Calzado Español (FICE);, que se ha fijado el tema de la formación como una de sus prioridades para el presente ejercicio. Así, FICE, según ha podido saber este periódico, ha apostado por la creación de un centro de referencia sectorial en el área de formación. Dicho centro será el que abastezca a las empresas de aquellos profesionales de los que carecen.

Este proyecto está aún en una fase embrionaria y se quiere vincular con las posibles ayudas que en materia de formación recoge el plan estatal del calzado. De momento, ya se ha contactado con el Servicio Valenciano de Empleo y Formación (Servef); para acometerlo conjuntamente.

Este problema ha sido analizado también por Elías Cascant, director del centro de estudios técnicos Gesfor, entidad que tradicionalmente se ha venido ocupando de impartir los cursos de formación continua en el calzado. Cascant aboga por que cada asociación patronal de zona disponga de su propio centro formativo. Es otra opción. Para llevar a cabo esta iniciativa, Cascant también alude a las ayudas que contempla el plan estatal. "Está claro que la formación profesional prácticamente no se hace en el calzado. Aquí en Elche tenemos un centro de aparado y algún instituto que dispone de un ciclo de grado medio de calzado para enseñar cortado, aparado y la cadena de montaje, pero creo que está desaprovechado", indica.

Dignificar el oficio

El responsable del centro Gesfor considera que el futuro del sector, al margen de cuestiones meramente comerciales, pasa por una "dignificación de la profesión. Actualmente la media de edad de las plantillas supera ya los 45 años. ¿Dónde está el relevo de estos trabajadores? Aquí todo lo que se hace es formación continua para trabajadores que ya están en la empresa, lo que ahora se llama formación profesional para el empleo, pero el pasado año, por ejemplo, sólo se desarrollaron ocho cursos con 80 trabajadores en toda la provincia de Alicante que estuvieran relacionados directamente con la fabricación de calzado. Hubo algún curso de patronista, cortado con sistemas 3D y poco más. Es cierto que se impartieron un total de 50 cursos, pero la mayoría tuvo que ver con la informática, el comercio electrónico, técnicos de ventas, etcétera".

En Elche se desarrollaron 30 cursos con una media de diez personas por curso, pero sólo un 5% de los mismos tenía que ver con lo que es concretamente la fabricación y producción, asegura Elías Cascant.

"El relevo va

a venir de los inmigrantes"

Según el director del centro de estudios Gesfor, ante el evidente desinterés de los jóvenes por trabajar en la industria del calzado y la falta de personal debidamente cualificado, "tenemos que aprovechar la mano de obra de los inmigrantes. Hay un excedente de mano de obra, pero no de profesionales bien cualificados. Lo que más demandan las empresas son cortadores y montadores bien preparados".