El picudo rojo ha arrasado cerca de 1.600 palmeras en Elche en lo que llevamos de año. Así lo indicó Manuel Laínez, director general de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de la Generalitat Valenciana, que ayer tenía previsto mantener en Elche una reunión con palmereros y viveristas precisamente para abordar la realidad de este problema.

Laínez advirtió, no obstante, que a simple vista esta cifra de palmeras que han tenido que ser arrancadas y destruidas parece muy elevada, pero en realidad , remarcó, una "ínfima parte" de las mismas corresponde al Palmeral histórico.

"Se puede defender el Palmeral", aseguró el responsable, quien agregó además que después de una primera fase de control de la plaga, podría ser posible la erradicación "en áreas que nos interesan mucho". No obstante, quiso mostrarse prudente puesto que en la lucha contra el picudo "vamos por el buen camino, aunque nos gustaría que la situación fuera mucho más satisfactoria".

En este sentido, Manuel Laínez reconoció que "tenemos una plaga compleja, que entra en la Comunidad Valenciana en 2004 y no tiene enemigos naturales", para agregar que "la posibilidad de extensión es de entrada explosiva".

En cuanto a las críticas desde el Ayuntamiento de Elche por la falta de apoyo técnico y económico, el recorte de recursos o el desvío de fondos del Gobierno para esta lucha, Laínez aseguró que no quería entrar en polémicas pero que actualmente el Consell está invirtiendo tres millones de euros en toda la Comunidad Valenciana para combatir esta plaga, una cifra muy similar a la del pasado ejercicio, según dijo.

"En el conjunto de estrategias contra plagas -en general-, el Gobierno participa -con fondos- en menos del 50%", declaró el responsable, quien, por otro lado, afirmó que hasta el último euro contra las plagas que llega de Madrid se destina a este fin.

Red de trampeo

Con respecto a la red de trampeo, el responsable defendió que ésta actualmente se encuentra en su tercera fase de mantenimiento, por lo que en líneas generales sí se han estado reponiendo los elementos químicos de las cerca de 2.900 trampas colocadas en un radio de 5 kilómetros en torno al Palmeral histórico.

Manuel Laínez quiso incidir además en los cinco objetivos que está siguiendo el Consell con respecto a este problema: protección de los palmerales históricos, apoyar los intereses de agricultores y viveristas, permanecer al lado de los ayuntamientos en esta lucha, actuaciones con particulares e impulsar líneas de investigación.

Recursos científicos

Con respecto a esto último, el director general de Investigación señaló que se están desarrollando cinco proyectos científicos independientes que abarcan nuevas sustancias químicas, cepas de hongos, nuevas trampas y profundización en la biología del insecto para tratar, en definitiva, de erradicarlo.

Por su parte, Ramón Espinosa, secretario técnico de Asaja Alicante, instó a las administraciones y a los propios viveristas y agricultores a "intensificar en 2011 lo ya ejecutado, y con más rigor".

A su juicio, hay que llevar tratamientos fitosanitarios "a esas 1.500 personas en Elche que tienen una palmera" en su campo o parcela, para agregar que "estamos en la línea para mantener este problema a unos niveles razonables".

La Generalitat Valenciana tiene censadas 4.300 parcelas de palmeras, de las que más de la mitad, en concreto 2.363, se encuentran en la provincia de Alicante, sobre todo al sur. Asimismo, en todo el territorio valenciano se han contabilizado 860 productores de palmeras a los que la Administración autonómica reparte periódicamente tratamientos fitosanitarios para combatir la plaga.