Hace doscientos años, Elche perdía a casi la mitad de su población por la llegada de una devastadora epidemia que arrasó con todo aquel que se puso en su camino. Pero la fiebre amarilla también acabó con las vidas de aquéllos que quisieron arriesgar su salud para salvar a los ilicitanos con la medicina.

Ahora, pese a que tan lejos queda ya aquel episodio de 1811, la memoria de todos aquellos médicos que sirvieron en la ciudad y que han puesto a disposición del ciudadano su profesionalidad a lo largo de la historia serán recordados para siempre. A partir de ahora, la estatua "El hilo del tiempo" estará presente entre todos los ilicitanos tras ser inaugurada ayer en la plaza del doctor Julio María López Orozco, con motivo del inicio del congreso de oftalmólogos Faco Elche 2011.

"El paso del tiempo está representado como si se tratara de un bucle que no tiene fin", explica su autora, María Jesús Soler, quien añade que, "al igual que el tiempo, la investigación en la medicina no puede quedarse anclada y ha de seguir evolucionando".

Así, el hierro, sobre un pedestal de piedra natural, rasgado también por el transcurso de los años, y el hormigón son los materiales que dan forma a este monolito hecho para recordar y ser recordado.

Precisamente ayer, profesionales de la medicina como el director de Faco, Fernando Soler; el vicepresidente de la Real Academia de Medicina de la Comunidad Valenciana, Justo Medrano; y el presidente del Colegio Oficial de Médicos de Alicante, Antonio Arroyo, arroparon el descubrimiento de esta figura, de manera previa a la apertura oficial del congreso internacional.

Inicio de Faco

Desde ayer, y hasta el sábado, setecientos oftalmólogos del territorio nacional y de fuera abordarán los últimos avances en la intervención de cataratas mediante la revolucionaria técnica vía láser, y debatirán sobre la calidad visual, y la operación del glaucoma, así como la utilización de distintos tipos de lentes. En la primera jornada se entregó, además, el primer premio "Fernández Martínez Sanz", en honor al propio médico, a Julia María Méndez Díaz, al doctor Ramírez, al doctor García y al doctor Felices del Complexo Hospitalario Ourense por su trabajo denominado "OCT, en busca de la incisión perfecta".