El picudo como principio y fin. Pero en todos los sentidos, ya que puede convertirse -ya está demostrado con una experiencia piloto en Elche- en el vehículo perfecto para acabar con su propia plaga. Así lo han demostrado técnicos de la empresa Glen Biotech que en los últimos meses han colocado 182 trampas abiertas para picudo, ubicadas fuera del Palmeral histórico, en pleno Camp d'Elx.

Estas trampas contienen un hongo natural (Beauveria Bassiana), descubierto precisamente en Elche en 2005, del que se impregna el insecto. Al salir y juntarse con otros picudos, éstos también quedan infectados y la propagación es ya inevitable. El hongo se come al insecto de dentro afuera. Las larvas mueren en cuatro días. Los adultos, en diez.

«Hemos conseguido que el mismo insecto haga de vehículo para la solución del problema, extendiendo el hongo a otras palmeras que no han sido tratadas previamente y, con ello, a otros picudos», relataba ayer Berenice Güerri, la representante de la empresa, quien añade: «Si el mismo insecto está dando solución a esto ¿por qué no aprovecharlo?».

Se trata de lucha biológica (también se está trabajando con nematodos, organismos normalmente microscópicos, con forma de gusano), una de las dos vías que junto al combate químico (utilización de productos fitosanitarios) está empleando el Ayuntamiento de Elche para contener este mal.

«Las trampas son como una estación de servicio, pero que en lugar de repostar y ganar fuerza» contribuyen a que el picudo se «lleve puesto» este hongo y contamine al resto, agrega Güerri, quien explica que han constatado que el 75% de la población de picudo en torno a estas trampas ha muerto por este agente natural.

«Es una herramienta muy sencilla para propagar y una solución muy eficaz», declara el edil de Vía Pública, Manuel Rodríguez, quien, por otra parte, lamenta que este hongo esté considerado dentro del paquete de lucha química y por tanto la UE exija largos informes y extens0s trámites burocráticos para que se autorice y por tanto se generalice.

Rodríguez anunció ayer por otra parte que en breve se darán cursos de formación a aquellos empleados municipales que trabajen en la calle para que avisen de la existencia de picudo en palmeras y se pueda intervenir a tiempo.

Por otro lado, el diputado ilicitano Juan de Dios Navarro intervino ayer en el pleno de las Cortes Valencianas y aseguró que el Consell «está tomando todas las medidas necesarias para erradicar la plaga del picudo rojo». Desde 2004 la Generalitat «ha destinado más de 25 millones de euros para la erradicación y control del picudo rojo, cofinanciados con el Ministerio de Agricultura», dijo.