Cuando la estabilidad depende del IBI

La subida o bajada del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para el año 2016 en Elche dependerá de lo que se decida en el pleno de hoy en una sesión (Ayuntamiento, 10 horas) que ha venido precedida estos días por la incertidumbre y que puede estar marcada por la tensión.

Incertidumbre porque uno de los tres partidos que conforman el gobierno local, Ilicitanos por Elche, no ha mostrado, en esta última semana, todas sus cartas acerca de si votará junto con PSOE y Compromís a favor de una «bajada» del 1% en el recibo del IBI para el próximo ejercicio.

Ilicitanos viene indicando desde hace tiempo que a lo mejor esa bajada podría ser mayor, por lo cual, asegura su líder Cristina Martínez, se ha venido solicitando documentación a Hacienda para estudiar a fondo si el margen podría ser mayor o no del que plantean sus «compañeros» de gobierno.

Lo cierto es que partidarios de Ilicitanos por Elche han criticado a Cristina Martínez por el hecho de que vaya a apoyar, si así lo hace, una bajada de sólo un 1%, lo que supondría sólo unos 3 euros menos en un recibo medio de 300, que es el mayoritario entre los propietarios ilicitanos.

Esas críticas internas de sus seguidores es lo que ha espoleado aún más a los ediles de Ilicitanos a tratar de estudiar si es posible un margen mayor de rebaja en el IBI, cuestión ésta con la que han chocado con el resto de sus socios.

En la junta de gobierno del 16 de octubre, los tres partidos, según informaron aquel día PSOE y Compromís, estuvieron de acuerdo en que la propuesta del ejecutivo fuera la «rebaja» de un 1% en el IBI, pero también ayudar a cerca de 3.200 familias con escasos recursos con un cheque de 100 euros para aliviarles en el recibo de este impuesto.

La edil de Hacienda, Ana Arabid, asegura que entre la «bajada» de un 1% del IBI y los cheques de 100 euros, el Ayuntamiento «dejará de ingresar» en 2016 un millón de euros y que una mayor cantidad implicaría no poder hacer frente a las políticas sociales que tienen en mente junto a Compromís e Ilicitanos para el próximo año.

Tras esa junta de gobierno, el miércoles 21 de octubre Martínez señalaba en una red social: «Estamos pensando si podemos subir o bajar el IBI porque parece que no hay suficientes ingresos para hacer frente a todas las necesidades de la ciudad y resulta que, por otro lado, se gestiona sólo con las siglas y el sí o sí porque sí. Propongo subir al IBI a los que derrochan el dinero de los demás. Ejemplo: que paguen la subida del IBI los gerentes, directores, secretarios, subsecretarios, asesores y demás familia hasta que no arreglen situaciones de mala gestión y dejadez como la que existe actualmente en el hospital de Elche».

El voto de los dos ediles de Ilicitanos hoy es fundamental para que la propuesta de la «rebaja» del 1% salga adelante. Si Ilicitanos vota en contra o se abstiene, y todo el resto de la oposición vota en contra, como han dado a entender que harán PP, Ciudadanos y Partido de Elche, no se podrá aprobar (PSOE y Compromís quedarían en minoría) y por tanto el futuro de este impuesto quedará en el aire.

Pero lo importante es que esto se traduciría a priori en que el borrador de los presupuestos para 2016 quedaría casi en papel mojado y, como consecuencia, un enfado monumental en el PSOE y Compromís con respecto a su «socio» de gobierno, que desde el principio viene defendiendo que sólo trabaja por el interés de los ilicitanos y no de ninguna sigla. La crisis de gobierno estaría servida.

Cristina Martínez y Fernando Durá ya votaron en contra de sus socios de gobierno en el primer pleno del nuevo mandato, a finales de junio. Los dos ediles de Ilicitanos por Elche se opusieron al reparto de dedicaciones exclusivas entre los distintos grupos municipales y con ello a determinadas retribuciones e indemnizaciones a concejales.

Entonces ya creó tiranteces dentro del equipo de gobierno, pero aquello fue una cuestión baladí comparado con esto. No es lo mismo dejar de ingresar casi un millón de euros por el IBI al rebajar un 1%, que dejar de contabilizar 5 millones, que es lo que podría darse si bajara el impuesto un 10%, tal y como pide buena parte de la oposición.

Y la oposición y parte de los votantes de Ilicitanos por Elche lo piden porque el decreto estatal que firmó Mariano Rajoy en 2011 por el cual se aplicaba un recargo del 10% en el recibo del IBI se extingue en diciembre y, por tanto, automáticamente los recibos, salvo que los ayuntamientos aprueben otra cosa, como en este caso en Elche, experimentarían esa bajada.

Por eso, la oposición, sobre todo el PP, habla no de bajada de un 1% del IBI, sino de «subida» del 9%, además de recordar que cuando el PSOE era oposición criticó duramente a los populares que hubieran subido éstos y otros impuestos.

Desde el PSOE se avisa que bajar el IBI un 10% supondría que unos 4.500 contribuyente propietarios de los inmuebles de mayor valor (más de 1.000 euros de recibo) se beneficiarían del mismo ahorro que los más de 116.000 contribuyentes titulares de pisos de menor valor.

Aseguran también que el 2,4% de los contribuyentes «se beneficia de una tercera parte de la reducción (+1,6 millones)» y que los contribuyentes que pagan entre 100 y 300 euros, que representan el 65% del total, recibirían sólo el 28% de la reducción global. En definitiva, según los socialistas, bajar un 10% el IBI supondría favorecer a aquellos que poseen una mayor capacidad económica.

Si hoy se diera el peor escenario posible para el Consistorio, cabría convocar un pleno extraordinario casi urgente para intentar llegar a un nuevo acuerdo sobre el IBI dentro o ya fuera de este «gobierno plural».