Cuando lo ves de lejos, lo primero que piensas es que es un cajero electrónico al uso o, en su defecto, una máquina para pagar el parking. Pero no. El primer dispositivo para comprar o vender bitcoins, que ya ha llegado a la provincia y está en Elche, en concreto en el Centro Comercial L'Aljub, no es un cajero tradicional, aunque en un futuro próximo ofrecerá servicios similares, como recargar tarjetas de móviles, operar con tarjetas de crédito e, incluso, comprar oro.

Pero, por el momento, el dispositivo, ubicado en la planta baja, detrás de una columna, cerca de la línea de cajas del hipermercado del centro comercial, permite básicamente cambiar nuestros euros por bitcoins y viceversa.

Javier Muñoz, director de ATMs Bitcoin Exchange, la empresa con sede en Girona responsable de este ingenio, explica que lo colocaron ayer hace justo una semana y que están registrando una buena respuesta. De hecho, asegura que ya han anotado un centenar de operaciones, tanto de compra como de venta entre euros y bitcoins. Pero ¿qué es en realidad el bitcoin?

«El bitcoin es una criptodivisa, un medio digital de intercambio de valor que empezó a funcionar en 2009. Se trata de un proyecto comunitario y de software libre, basado en criptografía, que no depende del Gobierno de ningún Estado ni de ningún organismo centralizado. Los bitcoins se pueden intercambiar de forma casi instantánea por dinero tradicional, y cada vez hay más comercios de todo tipo que lo aceptan como medio de pago», señalan desde el citado centro comercial, que ha decidido apostar por esta novedad.

Muñoz explica por su parte que esta moneda virtual se utiliza para hacer pagos prácticamente instantáneos a cualquier parte del mundo en apenas diez minutos y con una comisión muy baja, del 0,01%. Además, tiene una gran volatibilidad y puede servir en parte para ganar dinero especulando, comprando y vendiendo según el mercado.

De hecho, sobre las 10.15 horas de ayer, un bitcoin se cambiaba por 538,374 euros. Poco menos de cuatro horas después, el cambio ya estaba a 511,25 euros.

«Se calcula que para finales de este año, un bitcoin, debido a la devaluación del yuan, acabe valiendo más de mil euros, y para 2017 se calcula que podría valer más de 3.000», apunta Javier Muñoz, cuya mercantil ya ha instalado 25 cajeros por toda España y confía en ubicar el segundo de la provincia en Alicante antes de que acabe 2016

Desde L'Aljub agregan que entre las ventajas de esta moneda alternativa, respecto al dinero físico, se encuentra «su anonimato, que no se puede embargar, se trasmite con la misma facilidad y velocidad que un email, no es necesaria la intervención de un tercero para realizar un cobro o pago tanto nacional como internacional, se puede fraccionar tanto como se desee y es muy difícil de falsificar debido a su complejidad criptográfica y deslocalización».

En este último año su tecnología ha despertado el interés de la banca tradicional, pero, a tenor de lo comprobado ayer en el centro comercial, no el de la inmensa mayoría de los ciudadanos de a pie.

A casi todos les sonaba a chino el bitcoin y, al señalar el cajero en cuestión, indicaban que era eso, un simple cajero normal y corriente. Incluso una trabajadora de la cafetería de enfrente desconocía que se había instalado o para qué servía.

Lo cierto es que todo lo nuevo en materia de tecnología precisa de un margen para su penetración y asimilación por parte de la sociedad, por lo que solo el tiempo dirá si esta apuesta tiene recorrido o no.