Elche va a ser, junto a la ciudad almeriense de Adra, objeto de un estudio pionero a nivel nacional sobre los riesgos y peligros en materia de terremotos. Gracias al trabajo de dos investigadores de la Universidad de Alicante, Sergio Molina y José Antonio Huesca, Elche dispondrá, dentro de aproximadamente tres años, de un mapa de diseño sísmico gracias a un proyecto subvencionado por el Ministerio de Economía.

Este estudio piloto permitirá conocer la tipología y morfología del suelo y la situación del parque edificatorio de Elche frente a terremotos, entre otros muchos aspectos, gracias a esta iniciativa que cuenta con 60.000 euros de fondos estatales y otros 9.000, ampliables, del Ayuntamiento.

El cono sur de la provincia de Alicante y el sur de Andalucía son los dos mayores focos de Espala en cuanto a peligrosidad sísmica. En concreto, Elche se encuentra próxima a la falla de Crevillent y a la del Bajo Segura.

Este trabajo permitirá también aportaciones de calado de cara al próximo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y también pensando en la nueva ordenanza municipal de inspecciones técnicas de edificios.