Los componentes del proyecto Domus de la Universidad de Alicante (UA) han descubierto una lucerna con un diseño erótico durante la excavación que están realizando en el yacimiento arqueológico de La Alcudia de Elche. El dibujo de esta lámpara romana representa la relación sexual entre una mujer y una herma, que no es otra cosa que un pilar cuadrangular que está coronado por una cabeza masculina y lleva esculpido un falo a la altura que lo suele llevar el cuerpo humano. Una imagen que, según la moral judeo-cristiana, que se mantiene actualmente, podría calificarse de pornográfica. De ahí que para entenderla haya que conocer primero varios aspectos sobre ese tipo de diseños decorativos. «No podemos mirar con los ojos actuales», reseña Sonia Gutiérrez, catedrática de Arqueología de la UA y directora del proyecto Domus, a través del que tratan de radiografiar las diferentes etapas de la antigua Ilici.

Por lo tanto, hablemos de sexo... Aunque de sexo clásico. Según explica Sonia Gutiérrez, se trata de un diseño que seguramente se realizó en época Alto Imperial (entre el siglo I y III después de Cristo) y que juega con la temática erótica como tantas otras lucernas. «La representación del coito no era algo extraño en los objetos cotidianos romanos, aunque es más raro que nos encontramos una de estas escenas en el plato en el que apoyamos actualmente la taza del café. La moralidad, en aquella época, era totalmente distinta a la que tenemos ahora», señala.

Por otro lado, la también directora científica de la Fundación La Alcudia matiza que las hermas eran piezas que se colocaban en los cruces de caminos o en los barrios como elementos decorativos porque se pensaba que daban suerte. «Las hermas, en concreto, solían tener la cabeza humana de una divinidad como el dios Hermes o Dionisio y, de alguna manera, se utilizaban para proteger senderos o caminos», dice.

Con todo esto quiere decir que el dibujo no tiene por qué ser una representación literal. Es más bien, en su opinión, una escena que forma parte del imaginario erótico de aquel momento.

El proyecto Domus forma parte de una iniciativa del Instituto de Arqueología y Patrimonio Histórico de la UA-INAPH, financiado por el Programa Propio para el Fomento de la I+D+i. El equipo de arqueólogos lleva tres semanas trabajando en una zona donde ya han podido constatar que existió algún elemento doméstico que podría ser una antigua Domus romana.

De momento, solo han llegado a niveles que sitúan entre el siglo VII y VIII, aunque también han encontrado piezas de épocas anteriores. Por ejemplo, una pequeña escultura de una diosa Venus de época romana, restos de cerámicas, un «estilo» para escribir u objetos con los que jugaban como un dado. Aunque en un principio solo iban a estar un mes, Sonia Gutiérrez afirma que continuarán trabajando allí con futuros programas académicos de la Universidad de Alicante.

Actualmente, hay otra excavación en La Alcudia dirigida por el profesor de la UA Jaime Molina y en breve se iniciará otra liderada por el catedrático de Historia Antigua José Uroz.