Síguenos en redes sociales:

Las palomas invaden el Palacio de Altamira

La concentración de excrementos en algunos puntos hace que el personal de limpieza se plante y una escalera ha quedado inhabilitada

Las palomas invaden el Palacio de Altamiramatías segarra

Las palomas han echado raíces en el Palacio de Altamira y sus excrementos se han convertido ya en una complicación difícil de atajar y que viene de lejos. Tanto es así que en las últimas semanas la concentración de excrementos en algunas zonas de este inmueble ha hecho que hasta el personal de limpieza se plante y una de las escaleras de acceso a una sala del Museo Arqueológico y de Historia de Elche (MAHE) haya quedado inhabilitada. No obstante, desde las instalaciones municipales descartaron la existencia de riesgo y aseguraron que, en su lugar, se está utilizando un ascensor para acceder a los espacios museístico.

La sobrepoblación de este tipo de aves ha desembocado en la constante aparición de deposiciones, con su consecuente efecto corrosivo para la zona. De hecho, el equipo de gobierno se ha visto obligado a activar un protocolo específico para la protección de una construcción, catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC), donde la suciedad en suelos, ventanas y muros ha quedado prácticamente incrustada. En este sentido, desde el equipo de gobierno apuntaron a que la inspectora de Patrimonio de la Conselleria ha supervisado también el proyecto de protección del monumento, con la vista puesta en agilizar los trámites y no interrumpir las medidas que se van a empezar a adoptar encaminadas a reducir la presencia de palomas.

El problema ha llegado hasta tal punto, que según la edil de Cultura, Patricia Macià, técnicos de prevención de riesgos del Ayuntamiento están incluso elaborando un informe y realizando mediciones de la calidad del aire, debido a esa «invasión» de palomas, aunque, por el momento, se descarta riesgo alguno para los trabajadores. Y es que en las últimas semanas hasta el personal de limpieza del MAHE tomó la determinación de no adecentar los excrementos, al ser una tarea que se excede de sus funciones, según señalaron desde Comisiones Obreras, desde donde están realizando también estos días un seguimiento para ver cómo se resuelve el problema.

Ante el plante de los trabajadores que prestan el servicio habitual de limpieza, desde el Ayuntamiento aseguraron que esta semana se ha realizado una actuación más exhaustiva. No obstante, las palomas siguen estando afincadas allí, por lo que el problema de los excrementos persiste.Por ahora, además de los informes que se están preparando, desde el Ejecutivo local aseguraron que están cerrando presupuestos para hacer un cerramiento de los huecos y ventanas de todo el Palacio de Altamira, tanto en el interior, como en el exterior. Asimismo, la intención municipal es que se realice una primera limpieza en profundidad, que abarque todos los espacios y superficies que no sean sensibles de protección.

Desde al menos el pasado mandato, la plaga de palomas en el Palacio de Altamira da faena al Ayuntamiento, debido a la cercanía al Parque Municipal, donde tradicionalmente residen estas aves y donde habitualmente la gente las alimenta. Algo que supone un problema añadido.Estos ejemplares han convertido el Patio de Armas en un auténtico fortín para las palomas, para refugiarse entre los muros y reproducirse, lo que supone un auténtico quebradero de cabeza para el personal de las instalaciones municipales. Las numerosas colonias de palomas se extienden también por otros puntos de la ciudad.

Pulsa para ver más contenido para ti