La Policía Local impone en siete días 528 sanciones relacionadas con perros

La Policía Local de Elche ha inpuesto en la última semana hasta 528 actas denuncias relacionadas con la tenencia de animales. Con esta campaña, la Jefatura de la Policía Local ha tratado de dar respuesta a las múltiples quejas recibidas a través de Registro en las Oficinas Municipales de Atención al Ciudadano y en redes sociales. Estas reclamaciones permitieron elaborar un mapa con los puntos más conflictivos y de mayor incidencia en las distintas plazas y jardines de ciudad y pedanías.

La mayoría de las denuncias presentadas han sido por carecer o no exhibir documentación, cartilla o inscripción al censo, tal y como establece la ordenanza municipal. Pese a agilizar estas comprobaciones con la dotación de un lector de chips, casi un 42% de las denuncias han sido por este motivo, localizando a 8 animales (2% de las sanciones) sin chip.

Las siguientes infracciones más comunes estuvieron relacionadas con el paseo de animales de compañía sin correa y por defecaciones o micciones de forma contraria a la ordenanza, suponiendo 159 (30%) y 95 (18%) informes-denuncia, respectivamente.

«Repipí»

Pese a estos datos, desde la Policía Local señalaron que el porcentaje de propietarios que recogían los excrementos era muy alto, según observaron los agentes a pie de calle. Donde sí se apreció una falta de concienciación es con las micciones en lugares no permitidos y, en muchos casos, un ineficaz uso de botellas de agua. En este sentido, el ayuntamiento lanzó hace unos meses una campaña bajo el nombre de «repipí», para incentivar que los usuarios diluyeran con agua las micciones de los canes en la vía pública.

En cuanto a los perros catalogados como potencialmente peligrosos, se actuó sobre 27 propietarios por falta de colocación de bozal y sobre 14 porque su dueño no había pasado por los controles necesarios para su tenencia. Además, un perro de esta categoría fue intervenido y trasladado a la protectora de animales por carecer de cualquier documentación o bozal, a la espera de que su dueño regularice la situación.

Estos controles fueron realizados por agentes de la Unidad de Medio Ambiente y por el Grupo de Apoyo a Operaciones, durante una semana completa y en distintos puntos del término municipal.