El sector del calzado español, que en mayor parte está implantado en la provincia de Alicante, está ganando presencia durante los últimos años en los mercados de Norteamérica. Estados Unidos, Canadá e incluso México están aumentando sus pedidos a las empresas españolas, sobre todo a aquellas que han visto la necesidad de cruzar el océano Atlántico para compensar la caída de la exportación de zapatos a países de la Unión Europea. Esto ha provocado que en poco tiempo el mercado de Estados Unidos se haya colado entre los más importantes para el sector, donde cada vez demandan calzado de mayor calidad. El resultado ha sido que en un año el precio medio del par de zapatos que se vende a Estados Unidos ha pasado de ser de 40 euros a superar los 50.

Durante el último año, según el informe de comercio exterior elaborado por la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), con el apoyo de Web Help Payment Services, Estados Unidos se consolidó como el cuarto país comprador de calzado español, y el primero fuera de la Unión Europea. En 2018 las empresas españolas vendieron a EE UU 4,7 millones de pares valorados en 243,4 millones de euros. Estos datos reflejaron un incremento del 3,11% en volumen y del 9,18% en valor.

Valor

Lo que más aumentó, en este sentido, fue el precio del calzado que se exportó para ser distribuido en Estados Unidos. El precio medio alcanzó 51,37 euros, anotando un incremento anual del 10,23%.

Un incremento importante que no pasa por alto para los expertos en el sector, que destacan la dificultad que supone para las empresas extranjeras hacer negocio en Estados Unidos. En este sentido, el estudio elaborado por la patronal nacional sobre el mercado estadounidense se hace eco de que durante los últimos años la figura del distribuidor ha sufrido un grave deterioro para poder afrontar un buen desarrollo en el mercado de EE UU. En este sentido, apuntan a que «está surgiendo a partir de esta situación, una alternativa a través de agentes locales y redes de ventas, capaces de desarrollar dicho mercado con mucho más potencial y control directo de los precios, condiciones e imagen de la marca».

Por este motivo, consideran importante resaltar que «un requisito para potenciar de verdad las ventas, es poder ofrecer la facturación USA-USA a los clientes finales, por lo que se requiere tener una sociedad en USA para realizarlo».

En este sentido, ya existe varias asesorías que acompañan a los clientes europeos en la constitución de una sociedad en el mercado americano que genere mayor confianza al comprador de calzado, pese a que el origen de producto sea exterior.

Alternativas

En definitiva, como destacan desde las patronales, se trata de una nueva opción para que las firmas españolas ganen presencia en un mercado en el que durante los últimos años se está valorando positivamente el calzado que se fabrica en la provincia de Alicante. Prueba de ello son los continuos crecimientos tantos en el número de pedidos como en el precio, que no deja de ser, apuntan los expertos, de «un punto a favor de la industria, ya que el cliente de norteamérica valora y demanda el calzado de calidad que se fabrica en España».

Análisis de las oportunidades el 21 de mayo en Elche

Para analizar las oportunidades de negocio para el sector del calzado en Estados Unidos, la Federación de Industrias del Calzado Español ha organizado una jornada que se celebrará el 21 de mayo en Elche Parque Empresarial. Se trata del workshop formativo «Estados Unidos, oportunidades y retos», que analizará el panorama ferial en Estados Unidos, así como los diferentes retos y oportunidades que se presentan en el país. Para analizar la situación, contarán con la participación de expertos internacionales en la materia que, desde diferentes perspectivas, ofrecerán una visión integrada del mercado norteamericano.

El sector compensa en USA la caída en Reino Unido

La incertidumbre del Brexit relega a los compradores ingleses hasta la sexta posición del ranking

El puesto número cuatro que el mercado de Estados Unidos ha ocupado en el ranking de las exportaciones de calzado, con importantes incrementos de volumen y valor durante los últimos años, ha permitido a las empresas del sector, en parte, compensar la caída de las ventas que ha supuesto el Brexit de Reino Unido.

En este sentido, hasta que se iniciara el proceso de divorcio de Reino Unido de la Unión Europea, que aún está por resolver, la demanda de calzado español por parte de los clientes ingleses ha anotado varias caídas consecutivas, hasta estabilizarse y empezar a remontar de forma discreta durante el último año, pese a descender hasta la sexta posición en el ranking de países compradores de calzado español.

Reino Unido era hasta entonces el cuarto país comprador de calzado español, y ahora ha cedido su puesto a Estados Unidos, que crece, para alivio de las empresas que se atreven a vender su producto en el mercado norteamericano. Reino Unido también ha sido adelantado por Portugal, que actualmente ocupa el quinto lugar.

No obstante, durante el año 2018 las exportaciones a Reino Unido empezaron a recuperarse, anotando un incremento 6,5% en valor y 6,9% en valor. Los compradores de Reino Unido adquirieron el año pasado un total de 9,9 millones de pares de calzado valorados en 184,6 millones de euros.