La Fiscalía pide 16 años de prisión para un hombre de 50 años por agredir sexualmente a una menor de 13 años a la que chantajeó con publicar fotos íntimas suyas si no accedía a mantener relaciones sexuales. Los hechos ocurrieron en junio del año pasado, en una localidad de la Vega Baja. Al parecer, según señalaron ayer fuentes judiciales a este diario, el acusado contactó en un primer momento con la menor a través de la redes sociales, por lo que ya se conocían desde hacía varias semanas antes de verse en persona. Una vez consiguió ganarse su confianza le fue pidiendo fotografías cada vez más íntimas.

Tras conseguirlas, quedó con la víctima y la chantajeó con publicar esas fotos y enseñárselas a su familia y amigos si no la acompañaba a su casa con el propósito de mantener relaciones sexuales. La chica, por miedo, sostienen desde la Fiscalía, terminó acompañándolo y mantuvieron relaciones sexuales completas en contra de su voluntad.

La menor aprovechó que el acusado se había ido del domicilio, tras la agresión sexual, para escapar y, pese a que en un primer momento había ocultado a sus progenitores todos lo sucedido por miedo, acabó confesándole a su madre lo que había ocurrido. Entonces interpusieron una denuncia ante la Guardia Civil. Los agentes detuvieron al hombre poco después y desde entonces se encuentra en prisión provisional a la espera de juicio.

La sesión estaba prevista para ayer, a puerta cerrada, en la Sección Séptima de la Audiencia, pero no pudo celebrarse debido a una indisposición de la víctima, por lo que se señalará de nuevo en las próximas semanas, aunque aún no hay fecha concreta. Al tratarse de una causa con preso tiene prioridad con respecto al resto de asuntos, explicaron desde la Fiscalía.

Dos delitos

La Fiscalía pide 14 años de prisión por el delito de amenazas, a los que suma otros dos por haber contactado a través de las redes sociales con la menor. Tras la última reforma del Código Penal no solo se elevó la edad del consentimiento sexual a los 16 años (cosa que en este caso tampoco habría ocurrido, pues la chantajeó según el fiscal), sino que también se introdujo una pena para los contactos con menores en redes sociales con fines sexuales, ante la proliferación de casos con menores implicados, según señalaron ayer fuentes judiciales.

De hecho, este tipo de delitos está experimentando en la provincia un notable aumento en los últimos años. Los agresores en muchas ocasiones se hacen pasar por menores para ganarse la confianza de sus víctimas a través de internet y, cuando lo consiguen, tratan de obtener material íntimo y, en el peor de los casos, consumar una agresión sexual, como el caso que se juzgará en breve.