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TALLERES

Las bodas son cada vez más aventureras

La apertura de Firanovios confirma la tendencia de que las parejas optan cada vez más por celebrar el evento en playas, montañas o incluso selvas

Un instante de la primera jornada de Firanovios, que se inauguró ayer en el pabellón 1 de IFA. MATÍAS SEGARRA

Bodas minimalistas y en entornos naturales. Esta es la moda a la hora de celebrar la unión de una pareja. Cada vez son más los novios que optan por espacios al aire libre, como playas, pinadas, bosques o, hasta selvas artificiales, para celebrar uno de los días más especiales de su vida. Esta tendencia se confirmó ayer en la inauguración de la 19 edición de Firanovios, el Salón de Bodas y Comuniones que se celebrará hasta mañana en las instalaciones de la Institución Ferial Alicantina (IFA) y que coincidirá con Expofiesta.

Esta feria ofrece diferentes servicios, productos y artículos pertenecientes al mundo de las celebraciones, poniendo énfasis en todo lo relacionado con las bodas y comuniones. Este es un espacio de encuentro para que aquellos novios que tengan pensado casarse próximamente, o que ya tenga fijada la fecha de su enlace, descubran las tendencias que están de moda, las formas de organización más innovadoras y la búsqueda de la originalidad. Para ello, tienen a su alcancen en el pabellón 1 de IFA toda la información sobre campos como la fotografía, los trajes y vestidos, la joyería, la música, la animación, la decoración, la planificación de eventos, las agencias de viajes, la peluquería, el maquillaje o los restaurantes. En total son más de 85 empresas las que participan en esta edición de Firanovios.

Toque personal

«Ahora los novios buscan bodas diferentes, los lugares clásicos de celebración cada vez se demandan menos y se buscan entornos preciosos. A veces es complicado por el desplazamiento pero se obtienen bodas totalmente personalizadas», explica la experta Sussy Angel. «Hay muchos entornos bonitos, con vistas impresionantes y son ideales para ceremonias. La tendencia es apostar por bodas minimalistas en lo que lo más importante es resaltar el lugar en el que se celebra. Los novios modernos quieren enmarcar su amor en un sitio que les caracteriza y que crea un vínculo emocional. Y ahí se impone la naturaleza», añade desde su estand en la feria.

En cuanto a los vestidos de novia, hay colecciones que se adaptan a las celebraciones en playas y en entornos naturales. «Hay líneas para las bodas más informales con faldas fluidas, gasas y mangas largas», apunta Rosana Cantó. «Aunque hay novias de todo tipo, depende del estilo de cada una. Por eso también se mantienen colecciones con trajes sofisticados, tejidos trabajados y mucha labor artesanal», apostilla. Los trajes de hombre no se quedan atrás y ofrecen un gran abanico de tendencias. «Ya no es como hace unos años, en los que no se salía del azul marino, el negro y el gris. Hay más versatilidad que para la mujer. Vamos desde los chaqués clásicos y de estilo inglés hasta los estampados y casacas más transgresoras», señala Iván Guirau.

Por último, la decoración sigue la misma tendencia que los otros campos que influyen en una boda. «Este año se lleva mucho la decoración de tipo selva, la vajilla de cerámica y la cubertería dorada. Los espacios naturales y al aire libre se están imponiendo desde hace un par de años. Incluso las ceremonias se están llevando a este tipo de entornos», concluye Julia Llodrá.

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