La número 2 de Ciudadanos (Cs), Eva Crisol, ha pedido esta mañana al alcalde, Carlos González, ser la portavoz de la formación naranja, tras abrir su partido la puerta de salida al cabeza de lista, Eduardo García-Ontiveros.
Crisol ha presentado un escrito en la Oficina Municipal de Atención al Ciudadano (Omac) para informar sobre la situación del grupo municipal tras conocerse ayer que el comité de Garantías y Valores ha desestimado las alegaciones de García-Ontiveros a su expediente sancionador. Ante ello, la edil ha pedido hoy el cambio de portavoz, que recaería en sus manos, algo que tiene que ratificar el regidor socialista.
La concejal de Cs tan solo ha señalado hoy que "no soy parte, ni se me ha notificado nada, y no tengo que ver con la apertura del expediente" contra su compañero de filas.
Ciudadanos (Cs) no quiere a Eduardo García-Ontiveros de portavoz en Elche. Su líder está con un pie fuera del partido tan solo ocho meses después de que la cúpula de la formación naranja lo presentara como candidato a las municipales de 2019. El comité de Garantías y Valores notificó ayer al número 1 de Cs que desestimaba las alegaciones que presentó contra la suspensión de su militancia anunciada en el pasado mes de septiembre por «desobediencia».
Esta resolución implica automáticamente, según aseguró a este diario el secretario de Acción Institucional, Jesús Gimeno, la expulsión de García-Ontiveros de Ciudadanos. Frente a ello, desde el entorno del portavoz ilicitano negaron que el líder local hubiera recibido todavía el aviso formal de su cese. Por su parte, el concejal no quiso hacer declaraciones, pero sí que confirmó haber tenido acceso a la desestimación de sus alegaciones al mediodía de ayer.
De cualquier manera, fuentes cercanas al portavoz ya advirtieron que una vez se haga efectiva su expulsión, éste no tiene previsto dejar el acta de concejal, por lo que pasará a formar a ser un edil no adscrito, como ya ocurriera al final del mandato pasado también con el anterior portavoz de Ciudadanos, David Caballero. Otro episodio que evidencia la crisis que arrastra la formación en Elche desde hace meses por la disputa entre los partidarios de Argüeso y los Crisol frente a los de Toni Cantó.
No obstante, las intenciones de García-Ontiveros, una vez ratificado el comité de garantías la sanción del comité disciplinario, chocan a priori con la Secretaría de Acción Institucional, que ayer advirtió que le pedirán el acta con base en el planteamiento ético del partido. Precisamente, este departamento fue el que abrió el fuego contra el portavoz naranja. Acción Institucional desautorizó este verano la designación que García-Ontiveros realizó en agosto para poner a la número 3 de la lista, Irene Ripoll como asesora municipal.
Choque con Crisol
El partido consideró que el líder local se saltó el procedimiento al no haber consensuado con el grupo municipal, es decir, con la número 2 del partido, Eva Crisol, el nombramiento. Alguien que había propuesto a Mari Paz Gallud, a quien ya confió ese cargo solo un mes antes de las elecciones cuando precisamente el que fuera portavoz de Ciudadanos, David Caballero, acabó expedientado y saliendo del partido. Su salida se produjo por una denuncia interna de Eva Crisol contra el exlíder de Ciudadanos.
Tras esta nueva disputa, Eduardo García-Ontiveros trató de acreditar su decisión con unas alegaciones que ayer eran tumbadas por la formación. Uno de los argumentos que esgrimió este verano el portavoz de Ciudadanos ante Acción Institucional fue que la persona propuesta por Eva Crisol, Mari Paz Galluz, no tiene la titulación necesaria para acceder al puesto de asesora municipal y que su formación va en contra del Estatuto Básico del Empleado Público. Antes de designar a la periodista como asesora municipal, García-Ontiveros defendió también que la potestad para nombrar al personal de confianza recaía en el portavoz.
La edil Eva Crisol, en la que ahora están puestos todos los ojos por ser la número 2 y pasaría a ser la portavoz, también guardó silencio y evitó hacer declaraciones.
Su aterrizaje
Ni un año hace que el nombre de Eduardo García-Ontiveros se escuchaba en Ciudadanos para liderar el partido
Cuando en todas las quinielas sonaba la hija del exsenador Luis Crisol como candidata a la Alcaldía para las municipales, el partido dio la sorpresa y apostó por el abogado, tras la denuncia interna presentada por Eva Crisol.
El movimiento de la edil naranja en plena cuenta atrás para las elecciones acabó con la salida de David Caballero, quien acusó a su partido de estar empañado por el «nepotismo, servilismo y enchufismo», lo que llegó a altas esferas. La formación naranja buscó con García-Ontiveros renovar su imagen y hacer borrón y cuenta nueva amparándose en que había conformado una candidatura para mayo de 2019 con profesionales con poca o ninguna trayectoria en política, con experiencia en la ciudad y con un proyecto renovador.
Sin embargo, las urnas acabaron dando el primer disgusto a la formación local. Perdió un concejal (en el pasado mandato tuvo tres), sus militantes reclamaron una y otra vez una asamblea y autocrítica para pedir explicaciones tras haber perdido 16.000 votos de las elecciones generales a las municipales.
Después, las diferencias internas estallaron entre los dos ediles electos por el nombramiento de la asesora, el expediente sancionador al portavoz, el bloqueo de la candidatura de Daniel McEvoy (quien acabó presentando su baja) y de Emiliano Rodriguez para liderar un distrito, el batacazo en las últimas Generales, las bajas de militantes, la dimisión de Luis Crisol y ahora la expulsión del líder local.
