Mucho ha dado sí el Mercado Central en las últimas 24 horas. Por una parte, el Ayuntamiento requirió ayer a Aparcisa para que, en un plazo improrrogable de siete días, inicie la retirada del vallado y cubra las excavaciones arqueológicas. Por otro lado, el culebrón que tiene paralizado desde hace años el centro de Elche dio un nuevo salto a los tribunales, después de que el Partido Popular decidiera denunciar al alcalde, Carlos González, por negarles el informe del Mercado Central. La reacción del PSOE no se hizo esperar, al calificar como «grave error» la decisión adoptada por Pablo Ruz y considerar que crispa la vida política del municipio ilicitano.

En el primero de los asuntos, la polémica que envuelve al Ayuntamiento con Aparcisa, el Consistorio lanzó un ultimátum de siete días hábiles a la empresa concesionaria del nuevo proyecto del Mercado Central, en el que, al margen de exigirle la retirada del vallado provisional del entorno del edificio, le reclama que cubra las excavaciones arqueológicas y pavimente las calles afectadas por las mismas para devolver de inmediato la normalidad a las plazas de las Flores y de la Fruta.

Urbanismo dictó ayer un decreto, tras recibir la autorización de Cultura para realizar los trabajos, en el que advierte a la mercantil de que, en caso de incumplimiento de la resolución, los servicios municipales ejecutarán las obras de forma subsidiaria. La junta de gobierno acordó el pasado 15 de noviembre pedir a la Conselleria la autorización pertinente para normalizar la situación en el entorno del Mercado Central con las actuaciones descritas, salvo en la calle Ánimes, que ya está cubierta.

Desde el Ayuntamiento ilicitano se considera que la situación de las excavaciones arqueológicas está causando un bloqueo del desarrollo de la actividad comercial y perjudicando la imagen del entorno del Mercado Central y de todo el centro histórico. «Pretendemos proteger adecuadamente los restos arqueológicos, devolver la normalidad a la zona afectada por las excavaciones, dar impulso al comercio y facilitar el tránsito de los peatones», dijo ayer la edil de Urbanismo, Ana Arabid.

En paralelo a esto, el Partido Popular llevó al alcalde a los tribunales al acusarle de falta de transparencia a la hora de trasladar la información que le había solicitado sobre el informe jurídico elaborado por la firma Cuatrecasas, en el que se valoran los posibles motivos de rescisión del contrato del Mercado Central. «González piensa que el Ayuntamiento es su cortijo», apuntó Ruz ayer. El grupo municipal socialista quiso recordarle después al portavoz popular que el secretario municipal avala la negativa de acceso a la información y calificó su actuación como una «irresponsabilidad».