El Ministerio de Cultura ha incluido al Palmeral de Elche entre los bienes declarados Patrimonio Mundial que recibirán ayudas en 2020 para su conservación, protección y difusión, para lo cual se envió una memoria detallada sobre actuaciones a ejecutar este año. La resolución favorable coloca al Palmeral, que cumple este noviembre 20 años desde su declaración por la Unesco, en un selecto club de municipios que se beneficiarán de subvenciones por tener esta misma catalogación y haber sido seleccionados sus proyectos. Son los casos, por ejemplo, de la Colegiata de Santa María de Calatayud; el Camino de Santiago en Astorga; la ruta histórica por la ciudad de Cuenca; el arte Mudéjar Aragonés; el pavimento del Patio de Pellejería en Burgos, la muralla de Segovia o el Centro de Interpretación Alcalá Medieval, de Alcalá de Henares.
La inclusión de Elche entre los beneficiarios de ayudas tiene una importancia capital, entiende el concejal responsable, Héctor Díez, pues por un lado permitirá abaratar la factura de este año en tareas de mejora y limpieza, que ya estaban en previstas; y, por el otro, coloca al Palmeral ilicitano entre los bienes merecedores de ayudas públicas que tienen la consideración de anuales con lo cual se puede seguir buscando, en años venideros, la financiación del Gobierno para la misma causa.
Mantenimiento
Elche solicitó 271.000 euros para dos proyectos que, a priori, tienen un presupuesto mayor y que, tanto si se hubiera recibido la subvención como si no, se habrían realizado porque forman de las tareas de mantenimiento de un bosque de 160.000 ejemplares. El Ayuntamiento espera una ayuda de hasta el 75% (alrededor de 200.000 euros). Héctor Díez explicó que el presupuesto municipal de 2020 contemplaba 271.000 euros para los dos proyectos que van a recibir la ayuda.
Uno asciende a 169.400 euros, destinado a la Rutal del Palmeral (al mismo se han presentado siete empresas); y el segundo, de 101.760, a la recuperación y mejora de huertos que, en algunos casos, no se actuaba desde hace años. Gracias al primero, está previsto la restauración de 6.000 metros cuadrados de camino peatonal, pavimento y muretes tradicionales que con el paso del tiempo se han ido deteriorando; y renovando toda la señalítica informativa. El segundo permitirá la recuperación de huertos como Sol y Pontos, que estaban muy necesitados; y también el Hort de Baix, que anualmente sí tiene mantenimiento por su ubicación en el Parque Municipal.
