Más de medio centenar de centros educativos de la provincia cuentan con alumnos que han dado positivo por coronavirus desde que empezó el curso. En Elche al menos son siete los centros con grupos aislados, mientras en Santa Pola hay un centro, en Gran Alacant, con varios casos positivos.

La principal preocupación de las familias viene cuando reciben la notificación de Salud Pública de que sus hijos deben guardar cuarentena que en algunos casos ha llegado días después de que saltasen las alarmas entre la comunidad educativa. Es el caso del colegio Blasco Ibáñez de Elche donde al confirmarse el caso durante el fin de semana, la dirección del centro fue la que tomó la decisión de pedir a las familias que no llevasen a sus hijos a clase hasta que se pudiesen contactar con Salud Pública. A raíz de este caso se ha tratado de mejorar la comunicación entre los centros educativos y Salud Pública para comunicar los positivos por coronavirus desde el primer momento.

Además, Salud Pública ha llegado a un acuerdo con las áreas municipales de Sanidad y Educación para ofrecer a los docentes formación específica. Se trata de un curso que los profesionales de Salud Pública imparten a los coordinadores covid de cada centro educativo para que después éstos trasladen la información al resto del personal de los centros.

En Crevillent todavía no se ha tenido que confinar a ningún grupo, según indicaron fuentes municipales. Precisamente en esta localidad la decisión de unos padres de no llevar a su hijo al colegio durante los primeros días ha evitado confinar a sus compañeros. Se trata de un menor que dio positivo por coronavirus tras varios días con síntomas de resfriado. Fuentes oficiales explicaron que «como el niño no estaba bien, los padres, en una actitud responsable, decidieron que no fuese al colegio hasta tener claro qué tenía. Por este motivo, nunca ha estado en contacto con sus compañeros de clase y no ha sido necesario tomar medidas en su centro».

En Crevillent, a propuesta de la Concejalía de Sanidad, se va a ofrecer formación a todos los colectivos, entidades y profesionales que trabajan con grupo de menores. La intención es llegar a academias, organizadores de talleres y demás actividades en las que intervienen los menores cuando salen de los centros educativos para que puedan aplicar los protocolos y facilitar la labor de Salud Pública en el caso de que se diagnostique algún caso positivo de coronavirus entre los usuarios de estas actividades.